¿Y si el sexo es un potente aliado para evitar el contagio por coronavirus? Así parece demostrarlo la ciencia. Un reciente estudio del Instituto Kinsey de Investigación en sexo, género y reproducción y una investigación de la Universidad de Essen, Alemania apuntan a que los orgasmos refuerzan tus defensas contra infecciones, bacterias y virus.

En el ámbito ginecológico hay factores que también afectan la capacidad de una mujer de llegar al orgasmo.

¿Cómo es esto posible? La masturbación y el clímax generan en nuestro organismo toda una avalancha de hormonas que, entre sus funciones, participan en el combate contra infecciones y enfermedades.



GLÓBULOS BLANCOS, ORGASMOS Y CORONAVIRUS

Según muestra la ciencia, cuando sentimos excitación sexual o llegamos al orgasmo, nuestro organismo aumenta la cantidad de glóbulos blancos presentes en la sangre. Los glóbulos blancos son los responsables últimos de combatir las infecciones por virus y bacterias en nuestro organismo. En el mismo acto, y junto con la oxitocina, se liberan grandes cantidades de dopamina, un hormona que estimula el sistema inmunológico y lo fortalece para prevener infecciones y contagios de enfermedades víricas como el coronavirus.



Desde hace años se sabe que el sexo es un potente fortalecedor del sistema inmune, lo que ayuda a prevenir los síntomas del resfriado y la gripe. Ahora, se asegura que los orgasmos refuerzan las defensas contra el coronavirus.

Colateralmente, durante el orgasmo se liberan hormonas de la felicidad, cuyo poder de relajación actúa tambien como mitigador del dolor y la molestia asociada a la enfermedad. La dopamina y la oxitocina, conjuntamente, reducen los niveles de cortisol, que es el responsable del estrés, los episodios de ansiedad, miedo o angustia, algo también se ha recomendado controlar después de las imágenes de caos y pánico vividas ayer.

EXCITACIÓN Y SISTEMA INMUNE
Nuestro sistema inmune está programado en una compleja pero organizada red de células que trabajan coordinadamente para actuar cuando una sección falla o no es lo suficientemente fuerte para combatir la amenaza, ya sea un virus o una infección.

La masturbación y cualquier otro elementos que permita alcanzar el orgasmo se ha mostrado, también, como un potente neutralizador de los efectos negativos de otros malos hábitos, como la ausencia de ejercicio o el abuso de sustancias como el alcohol o el tabaco.

ESTUDIOS QUE AVALAN LA RELACIÓN ENTRE ORGASMOS Y FORTALECIMIENTO DE LAS DEFENSAS

No es la primera vez que la ciencia viene a dotar de gran importancia al placer sexual. Así, según diversos estudios independientes, mantener relaciones sexuales con regularidad retrasa el envejecimiento y fortalece las defensas.

 

Fuente: merca2.es