En un acto un tanto extraño, el periodista Julio Martínez Pozo salió en defensa de la honorabilidad de Berlinesa Franco quien «renunció» tras un escándalo de corrupción en el INAIPI, donde fueron destituidos siete funcionarios.
De acuerdo a lo expuesto por el comunicador, Franco ya había puesto su renuncia en febrero, pero desde el gobierno prefirieron ofrendarla como sacrificio ante el acto corrupto del cual la desliga por completo. Indicando que desde el Palacio Nacional le dijeron que continuara trabajando para no entorpecer lo ordenado por Danilo Medina.
Julio Martínez Pozo dijo que la licitación fraudulenta se hizo de forma rápida para ganar tiempo y realizar los repartos de las ayudas programadas, omitiendo por completo la denuncia hecha por Pablo Cabrera, presidente de la empresa La Z, distribuidora de alimentos y proveedora del Estado, quien dijo que la licitación por 100 millones de pesos, fue publicada el 31 de marzo, a las seis de la tarde y cerraba al día siguiente a las nueve de la mañana por lo que acudió a antes del cierre a depositar los documentos.
Cabrera Explicó que junto a él, había otras tres empresas participantes, las cuales debían presentar 40 mil kits de comida a 2,500 pesos cada uno, pero que “con 600 pesos se hacía el kits”.
Pozo no solo defiende a Berlinesa, sino también alJuan López, sub director general de Gestión Institucional, Ramona Hernández, directora Administrativa y Financiera, Alberto José Patxot, director de Planificación y Desarrollo, Stefany Severino Cuello, encargada del Departamento Jurídico, y Clementina Pieter, responsable de acceso a la información pública de esa entidad, alegando que todos a partir de este momento quedarán condenados por la opinión pública, ya que sus nombres salen reseñados en la prensa nacional.
Del INAIPI también quedan destituidos de sus cargos Ricardo José Guzmán Domínguez, y Mayra Martínez de la Rosa, director de Operaciones y encargada del Departamento de Compras del INAIPI, respectivamente.