(EFE) – Los equipos de rescate suspendieron este martes la búsqueda del cuerpo de la niña Liz María nueve días después de que el autor confeso de su asesinato afirmara que, tras abusar de la menor y matarla, habría lanzado el cadáver al mar Caribe.

El jefe de los Bomberos de Santo Domingo Este, superintendente general Rafael Javier Bueno, confirmó a EFE que se declaró la “búsqueda sin resultado positivo” y que “ya no tiene sentido” continuar con las tareas de rescate, que se vieron interrumpidas por el paso de la tormenta tropical Laura por el país en las jornadas del domingo y el lunes.



“Después de nueve días” la conclusión es que el cuerpo “no está en el lugar” donde Starlin Francisco Santos, alias El Panadero, afirmó haber lanzado el cadáver de la pequeña metido en un saco con piedras. Transcurrido este tiempo, además, el cuerpo presentaría una gran descomposición, apuntó.

Si, efectivamente, Santos tiró a la niña en ese lugar “se la llevo el mar adentro o en dirección oeste franco” y a estas alturas ya “está muy lejos”, o bien no la lanzó, conjeturó el jefe de los bomberos, que han realizado las labores de rescate con la colaboración de la Armada Dominicana y miembros de la Defensa Civil.



Desde que el autor confeso del crimen, que guarda prisión preventiva, e indicó el lugar donde se deshizo del cadáver, en el kilómetro 14 de la Autopista de las Américas, se ha peinado la costa en un radio de unos dos kilómetros.

También se han hecho incursiones en el mar con embarcaciones, mientras que un helicóptero y drones realizaban la búsqueda desde el aire.

Si, efectivamente, Santos tiró a la niña en ese lugar “se la llevo el mar adentro o en dirección oeste franco” y a estas alturas ya “está muy lejos”, o bien no la lanzó, conjeturó el jefe de los bomberos, que han realizado las labores de rescate con la colaboración de la Armada Dominicana y miembros de la Defensa Civil.

Desde que el autor confeso del crimen, que guarda prisión preventiva, e indicó el lugar donde se deshizo del cadáver, en el kilómetro 14 de la Autopista de las Américas, se ha peinado la costa en un radio de unos dos kilómetros.

También se han hecho incursiones en el mar con embarcaciones, mientras que un helicóptero y drones realizaban la búsqueda desde el aire.