Mientras que Microsoft Word se ha convertido en uno de los editores de texto más populares y utilizados desde hace años (como consecuencia del número de usuarios que lo usan cada día), PDF se ha convertido a su vez en el formato por excelencia para documentos de texto en los que se persigue mantener tanto su diseño como su contenido.

No en vano, un archivo con esta extensión es un archivo de formato de documento portátil, que habitualmente tienden a ser utilizados con la finalidad de distribuir documentos de solo lectura que conservan el diseño de la página.



Aunque es usado sobre todo para libros electrónicos, documentos escaneados, manuales de usuarios o formularios, lo cierto es que nosotros en casa también podemos optar por este formato de archivo, en especial en aquellos casos en los que deseamos compartir un determinado documento con un conocido o familiar, pero no queremos que lo modifique.

Hasta hace unos años, para convertir un documento de Word a PDF se necesitaba una aplicación desarrollada por terceros, puesto que el programa de edición de textos de Microsoft no contaba con la función para poder hacerlo.



Por suerte, desde hace un tiempo ya no es necesario instalar ningún programa externo o incluso dirigirnos a distintas herramientas online (con el riesgo que eso supone para la seguridad del contenido de ese determinado documento y de nuestra propia privacidad en sí). Al contrario, solo tenemos que seguir utilizando Microsoft Word para convertir nuestro documento al formato PDF.

Convirtiendo nuestro documento de Word en PDF

Hoy en día el proceso a seguir para convertir cualquier documento de Word en PDF basta con seguir los pasos que seguiríamos, por ejemplo, a la hora de guardar nuestro archivo. No se requiere más.

De hecho, tan solo debemos abrir el documento que deseamos convertir, dirigirnos al menú principal, pulsar sobre Archivo y luego sobre Guardar como. Ahora, en la ventana emergente que aparece, únicamente tienes que dirigirte a Formato del archivo, y en el menú que aparecerá, escoger el formato PDF.

Una vez hecho esto, de forma predeterminada aparecerá como escogida la opción Ideal para imprimir, por lo que en realidad no tendríamos que hacer más salvo pulsar en el botón Exportar.

Recuerda que, una vez convertido en PDF, el propio archivo portable no podrá ser editado a menos que vuelvas a abrir el documento de Word en la aplicación. O, bien, abrirlo en el programa Adobe Acrobat Pro o cualquier otra aplicación diseñada para la edición de este tipo de documentos.