Un vacío en la comunicación entre el coronel César Maríñez Lora y la patrulla y la lluvia de disparos por intuición de los agentes acabó con la vida de Joel Díaz y Eliza Muñoz mientras los «presuntos asaltantes de una pasola» escapaban, fue lo que ocurrió en Villa Altagracia, según lo confesado por los involucrados en el acribillamiento «por error» de la pareja de predicadores.

Tras 21 días del suceso, el Ministerio Público arrestó a Maríñez, quien fungía como director de la dotación policial de Villa Altagracia. Este era uno de los reclamos de la defensa de la pareja ultimada, que la persona que dio la orden para abrir fuego contra el vehículo fuera incluida en el expediente.



¿Dio la orden?

Durante los primeros interrogatorios en los involucrados en la muerte de estos inocentes, documento al que tuvo acceso la periodista Edith Febles, Mariñez confesó que recibió el reporte del robo de una pasola en Bonao y a los responsables de este delito es a quienes perseguía la patrulla. Mariñez dijo que durante el desarrollo del operativo hubo una falla en la comunicación y cuándo retornó la señal, ya sus súbditos habían abierto fuego en contra del vehículo equivocado.



Dijo que se presentó al lugar de los hechos a pocos minutos, admitió el uso de un fusil asignado a él y una mini Uzy que utilizan para los servicios de patrullaje.

Arresto

Maríñez, quien solo había sido destituido de su cargo por este hecho, ayer fue arrestado por el Ministerio Público. La disposición la adoptó la fiscal titular de Villa Altagracia, Fátima Sánchez Guzmán, después de que en la investigación encontraran pruebas que comprometen al coronel en el hecho en en el que murieron Eliza Muñoz Marte, de 32 años, y Joel Eusebio Díaz Ferrer, de 35.

El coronel Maríñez está detenido en el Centro de Privación Provisional de Libertada de Ciudad Nueva y se e espera que en las próximas horas sea presentado ante un juez de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente para que le dicten medida de coerción.

Con información de Hoy Digital