Las nuevas herramientas digitales han abierto ventanas de opciones para cometer delitos tecnológicos que se convierten en algo común. Chantajes, usurpación de identidad, abuso de confianza y otros crímenes han crecido a través de estas tecnologías u otros dispositivos electrónicos.

Por ejemplo, en la República Dominicana las vídeo llamadas se han convertido en mecanismos para que cualquier persona se convierta en víctima de los ciberdelincuentes.



De acuerdo al Teniente Coronel Roberto Román Contreras, comandante del Departamento de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, en el 90% de los casos, asumen que esto lo realizan personas que están presas en las cárceles del país.



Román Contreras, dijo a El Informe con Alicia Ortega que en el año 2020 recibieron 230 denuncias de este tipo y en lo que va de año van 87. De estos casos el año pasado judicializaron 110 casos, mientras que en estos meses las autoridades dicen haber procesado 38.

Con relación a la extorsión sexual, el DICAT hizo un llamado a hombres y mujeres que también dice se han convertido en víctimas, para que se querellen y así ayuden detener estas redes.