Sídney, Australia. Una invasión de ratones obligó este martes a las autoridades australianas a comenzar a evacuar a cientos de presos de una cárcel de Nueva Gales del Sur, para reparar los daños causados por estos roedores.
Los ratones royeron los paneles del techo y cables del centro penitenciario de Wellington, situado en una zona rural.
«La salud, la seguridad y el bienestar del personal y de los reclusos son nuestra prioridad número uno, por eso es importante actuar cuanto antes para realizar las obras de reparación», señaló en un comunicado Peter Severin, el comisario encargado del servicio correccional de Nueva Gales del Sur.
Hasta 420 presos y 200 miembros del personal serán trasladados a otras instalaciones antes de finales de junio.
«Queremos hacer estas obras de una sola vez (…) para dejar de ser víctimas de este flagelo», explicó Kevin Corcoran, subcomisario de la administración penitenciaria.
Desde hace meses el este de Australia sufre una invasión de ratones que causan destrozos en las viviendas y devoran cultivos.
Es la enésima catástrofe para los agricultores australianos, después de años de sequía, meses de devastadores incendios forestales a finales de 2019 y, más tarde, de inundaciones.
Los roedores aparecieron en octubre, coincidiendo con una cosecha excepcional después de la peor sequía jamás registrada.