Contrario al miércoles cuando no se observaban haitianos en la frontera con Dajabón, tras el asesinato de su presidente Moise Jovenel, este jueves haitianas y haitianos residentes en poblados cercanos a esta zona acudieron al río Masacre a lavar sus ropas, como de costumbre.

Mientras el portón fronterizo está cerrado y reforzada la seguridad, la frontera está en calma. Los haitianos que viven del lado dominicano permanecen en sus casas.



Indica el Listin Diario que desde el puente sobre el Masacre lo que se ve es que en el lado de Juana Méndez está todo en calma. Solo las personas que están en el río lavando sus ropas.

Desde que el presidente Luis Abinader dispuso el cierre de toda la frontera, la medida se cumple y se observan los militares custodiando la zona.