Los procesos de selección para un puesto pueden llegar a ser verdaderamente largos y prologarse durante meses. Desde Recursos Humanos tienen la tarea de escoger al mejor candidato y por ello muchas veces se realizan varias entrevistas de trabajo con distintos responsables.
Este cara a cara puede realizarse tanto en entrevistas individuales, donde se evaluarán los conocimientos, la experiencia y las habilidades del candidato; como en grupo, que suelen ser bastante habituales en empresas donde es necesario el trabajo en equipo.
Indica
existen otro estilo de procesos donde el seleccionador emplea métodos menos convencionales y que generan un ambiente de rigidez. Las entrevistas de tensión o extremas son aquellas en las que se pone a prueba al postulante para conocer si será capaz de mantener el ritmo del puesto. En muchos casos este tipo de técnicas no son recomendables, ya que implican preguntas delicadas que pueden llegar a ser ilegales.Cómo son estos procesos
Tal y como apuntan desde InfoJobs, son un tipo de reuniones donde «el seleccionador emplea modos de actuar que generan un alto grado de tensión en el candidato». Algunas de las técnicas más utilizadas son las preguntas incómodas, la postura defensiva, las actitudes de superioridad o incluso obviando la presencia del propio aspirante.
Estos casos van más allá de valorar el currículum y contrastar los conocimientos, el objetivo real es evaluar las reacciones del candidato, saber si su personalidad encajará en la empresa y si es capaz de mantener la calma en situaciones de estrés. Esto puede darse en muchos sectores, tanto aquellos donde hay atención al público como otros en los que se encargan de importantes activos de la compañía.
En muchas ocasiones, el aspirante que finalmente es seleccionado lo consigue por demostrar sus aptitudes y competencias bajo estas situaciones de presión. Además, no siempre se realizan mediante preguntas, a veces también se pueden aplicar juegos o acertijos que resolver en un periodo determinado.
Métodos para superarlas
Desde InfoJobs animan a los candidatos a mantener la calma en estas situaciones, evitando reaccionar de forma agresiva, maleducada o excesivamente pasiva. Cuando te realicen preguntas muy directas hay que tratar de rebatirlo de forma constructiva y destacar los puntos comunes con el entrevistador.
Asimismo, cuando detectes que el reclutador está aplicando alguna de estas técnicas extremas y no te sientas preparado para ello, házselo saber. Por un lado puedes enfocar la conversación a otro estilo o directamente pedir salir de este proceso de selección, aunque advierten: «muchas veces implica perder la opción a conseguir el puesto de trabajo».