SANTO DOMINGO, RD.- El quinteto representante de Canadá venció a la selección de República Dominicana 85-79 en un partido celebrado en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto, extendiendo su invicto a 3-0, y tomar el comando del Grupo C de Las Américas, al cierre de la jornada sabatina de la Segunda Ventana del Calsificatorio al Mundial de Baloncesto 20-23.

Los criollos ahora tienen marca de 1-2, ocupando el segundo peldaño.



Bahamas, que derrotó a Islas Vírgenes a primera hora, tiene 1-2, mientras los isleños colocan su récord en 0-3, en el referido Grupo, en el que clasificarán a la siguiente fase los primeros lugares para formar un paquete de seis equipos, con el Grupo A.

Una ofensiva repartida con cuatro hombres con cifras dobles en anotación, liderada por Kyle Witjer quien produjo 15 puntos, fue clave para el triunfo de los canadienses.



Siguieron a Witjer en la ofensiva Phil Scrubb 14, Kaza Kajami-Keane 13 y Kassius Robertson con 10 tantos.

En la causa perdida por el quinteto dominicano, el capitán Víctor Liz sacó la cara con 29 puntos, siendo el mejor anotador del desafío.

Sin embargo, el equipo dominicano se presentó anoche con una ofensiva bastante desordenada, y pésimo desde la línea de tiros libres, al fallar 21 intentos.

En una primera mitad bastante batallada, en la que ambos conjuntos se emplearon bien a fondo en la defensa, la tropa canadiense se fue al descanso con ventaja de seis puntos en la pizarra (42-36), siendo Kyler Alexander su mejor hombre en esa parte con 8 tantos.

Por Dominicana, una vez más el capitán Víctor Liz, quien estuvo bastante activo en la defensa y ataque rápidos, consiguió 14 para encabezar la ofensiva tricolor en esa primera parte.

A partir del tercer cuarto, los canadienses volvieron a imponer su excelente rotación del balón a la ofensiva, la que lograron combinar con una visible ventaja en estatura debajo de los tableros, y al término de ese período dominaban 64-56.

El equipo quisqueyano presionó en el último cuarto, pero quedó corto sin poder contrarrestar el dominio y ventaja del equipo visitante.