Jesucristo ha querido que precisamente hoy, el domingo siguiente a la celebración de su resurrección sea resaltada su inmensa misericordia para toda la humanidad¨.

Este importante mensaje le fue revelado a Sor Faustina Kowalska en 1931, religiosa polaca que fue canonizada por el querido Papa Juan Pablo II en el año 2000.



A través de ella quiere que se expanda este mensaje de amor: «¡Hija mía!, habla a todo el mundo acerca de Mi Infinita Misericordia sea el refugio de todas las almas; pero, ante todo, de todos los pecadores.

El que recibiere en este día los sacramentos de la Penitencia y del Altar, obtendrá la completa indulgencia de sus pecados y penas temporales. Nadie tenga miedo de venir a Mí, aunque sus pecados sean los más enormes.



Esta Fiesta viene del abismo de Mi Misericordia y se funda en lo más profundo de Mi Misericordia Yo deseo que sea celebrada en el primer domingo, después de la Pascua Florida, con gran solemnidad.

Indica MELISSA CORREA  en el periódico Hoy, que la fiesta de la Divina Misericordia había sido, hasta el año 2000 una devoción privada. Pero ya el 5 de mayo de ese año la Congregación del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos de la Santa Sede declaró el Segundo Domingo de Pascua, es decir, el domingo siguiente al Domingo de Resurrección, como «Segundo Domingo de Pascua o de la Divina Misericordia».

Así, lo que era una devoción privada, muy extendida ya en muchas partes del mundo católico, pasó a ser fiesta oficial de la Iglesia.

Detalles de la imagen

Santa Faustina, fue una religiosa polaca de la Consagración de Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia cuando estaba en pleno apogeo la Segunda Guerra Mundial y muchas almas recibieron gracias de conversión y de fortaleza al practicar esta devoción que se nos da a conocer a través de una bella estampa de Jesús que intentaré describir a continuación: En esta imagen aparece Jesús con la mano derecha bendiciendo y de su costado salen dos rayos de luz, uno blanco y el otro rojo y debajo la inscripción: Jesús, en ti confío!

Los colores rojo y blanco representan la sangre y el agua que salieron del costado de Jesús en el momento que un soldado se lo traspasó con su lanza colgado en la cruz redentora. (Jn 19, 34).

La sangre evoca el sacrificio de la cruz y el don eucarístico; el agua, nos recuerda el bautismo, y el don del Espíritu Santo.

Sobre las actividades

El evento se celebrará de manera virtual en la Casita de la Divina Misericordia a las 2:00 de la tarde y se transmitirá por sus redes sociales.

Mientras, que en la Parroquia Jesucristo Sumo Eterno Sacerdote se realizará de 2:00 a 7:30 de la noche