Se han detectado 151 casos de salmonelosis vinculados al consumo de productos de chocolate de la marca Kinder, fabricados en Bélgica, según confirmó este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Un análisis en Reino Unido encontró una vinculación genética entre la bacteria que causa esta enfermedad, la Salmonella, y varios productos Kinder distribuidos en 113 países.



El primer caso de este brote se detectó en diciembre de 2021 y se ha comprobado que muestra resistencia a seis tipos de antibióticos.

Los más afectados hasta ahora han sido niños menores de diez años y mujeres, que suman un total de 134 de los 151 detectados. Esto se explica por que se trata de un producto dirigido sobre todo a la población infantil.



Este brote ha hecho saltar las alarmas en la OMS porque de los 21 casos con síntomas severos, nueve han requerido hospitalización (43 %), lo que se considera una tasa elevada.

¿Cuáles son los países donde ya se han confirmado casos?

La OMS indicó que considera que el riesgo de que la enfermedad causada por este brote se expanda en Europa, centro hasta ahora de los casos, o en el mundo es moderado y ello «hasta que haya información sobre el retiro completo de los productos implicados».

Bélgica, foco inicial del brote, es el país que más casos ha notificado (26), seguido de Francia (25). En España hay un caso confirmado, aunque según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, se investigan otros dos que podrían estar relacionados.

Como medida de contención la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) ha ordenado l a retirada de todos los productos Kinder: Kinder Sorpresa, Kinder Sorpresa Maxi, Kinder Mini Huevos y Schoko-bons.

Se identificaron casos en nueve países europeos hasta ahora: Bélgica, Francia, España, Alemania, Irlanda, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos y Suecia.

La salmonelosis es una enfermedad de transmisión alimentaria asociada comúnmente al consumo de huevos, carne y productos lácteos y suele provocar síntomas leves en los pacientes, entre los más comunes la fiebre, el dolor abdominal o las nauseas.

No obstante, algunas veces la enfermedad puede ser mortal. La gravedad de la dolencia depende de factores propios del paciente y del serotipo de Salmonella.

Para evitar el contagio de esta enfermedad, la OMS recomienda una correcta higiene de manos, especialmente después de entrar en contacto con animales; la cocción completa de los alimentos y lavar las frutas y verduras antes de su consumición.