La NBA aumentó la presión sobre los Dallas Mavericks para que cesen las burlas y otras infracciones de sus jugadores de banquillo al aplicarles una tercera multa, en esta ocasión de 100.000 dólares.

Esta última sanción es producto del comportamiento del banquillo durante la derrota del viernes ante los Golden State Warriors, con la que Dallas se colocó en desventaja 2-0 en la final de la Conferencia Oeste.



«En múltiples ocasiones, varios jugadores y un miembro del cuerpo técnico estuvieron de pie durante un período prolongado en la zona del banquillo del equipo de los Mavericks, se alejaron del banquillo y estuvieron en la pista de juego o la invadieron durante la acción del partido», argumentó en un comunicado Byron Spruell, presidente de operaciones de la NBA.

El equipo texano, que lidera en la cancha el esloveno Luka Doncic, ya había recibido multas por hechos similares de 25.000 y 50.000 dólares durante la eliminatoria anterior ante los Phoenix Suns.



El técnico de los Warriors, Steve Kerr, dijo el viernes que no le preocupaban las acciones de los suplentes de los Mavericks siempre que no interfirieran en el juego.

La estrella de los Golden State, Stephen Curry, hizo un gesto al banquillo rival cuando anotó el triple que culminaba el triunfo de su equipo el viernes, después de protagonizar una espectacular remontada.

Durante el juego, Curry había cometido una inusual pérdida de balón al lanzar un pase hasta el banquillo de los Mavericks donde había un jugador de pie vestido con un suéter blanco, el color del uniforme de los Golden State.