París, Francia. La oferta y el consumo de drogas, que disminuyeron ligeramente en 2020 por la crisis sanitaria, volvieron en 2021 a sus máximos anteriores a la pandemia, advierte el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT) en su informe anual.

El análisis de las aguas residuales de 75 ciudades de 25 países (23 países de la UE, Turquía y Noruega) reveló «un aumento general de las detecciones» de cannabis, cocaína, anfetaminas y metanfetaminas.



El éxtasis (y su ingrediente activo, el MDMA) es la única droga «para la que los residuos han disminuido en la mayoría de las ciudades analizadas», tal vez porque los clubes nocturnos de muchos países todavía estaban cerrados en la primavera de 2021 cuando se realizó el estudio.

En cambio el cannabis sigue siendo, con diferencia, la sustancia más consumida, ya que «más de 22 millones de adultos europeos declaran» haberla consumido en 2021, según el informe.



Le sigue la cocaína (3,5 millones), el MDMA/éxtasis (2,6 millones) y las anfetaminas (2 millones).

Por otra parte, la oferta de droga «sigue siendo elevada en toda la UE» e incluso supera los «niveles prepandémicos» para la cocaína.

En 2020, último año del que se dispone de datos, se incautaron en la UE «213 toneladas [de cocaína], cifra récord», a pesar de las restricciones de viaje relacionadas con el covid-19 y el cierre de locales de fiesta.

En 2019 se incautaron un total de 202 toneladas de cocaína.

«Las drogas tradicionales nunca han sido tan accesibles y siguen apareciendo nuevas sustancias de alta dosis», advierte el informe.