Tesla lanzó un llamado a revisión en Estados Unidos a poco más de 40.000 vehículos por un posible problema en el sistema de dirección eléctrica asistida, que será solucionado a distancia.

La agencia de seguridad en rutas, la NHTSA, dio cuenta en un documento fechado el primero de noviembre y publicado este martes, de un posible defecto de este sistema.



«Una dirección asistida reducida o ausente no afecta el control del volante, pero puede requerir un esfuerzo más importante del conductor para reposicionar el vehículo, en particular a velocidades bajas», explicó la NHTSA.

Una actualización de un programa instalado en los modelos afectados – Model S y Model X fabricados entre 2017 y 2021- es necesaria para solucionar este problema. Esto se realiza a distancia y gratuitamente.



Según Tesla, 97% de los vehículos concernidos tuvieron una actualización al primero de noviembre.

Tesla ya realizó varios llamados en Estados Unidos este año para modificar a distancia programas potencialmente problemáticos.