La Corte Suprema de Estados Unidos debe pronunciarse este viernes sobre la mifepristona, un fármaco abortivo, con un fallo esperado sobre las restricciones ordenadas por un tribunal inferior sobre esa píldora de uso generalizado en el país.

La máxima instancia judicial de la nación tiene hasta la medianoche del viernes, hora del este de Estados Unidos (04H00 GMT del sábado), para decidir cómo manejará el caso de aborto más importante desde la anulación del derecho constitucional a la interrupción del embarazo el año pasado.



El alto tribunal, de mayoría 6-3 de jueces conservadores, tenía programado emitir un fallo el miércoles, pero postergó dos días una suspensión que congela las decisiones de los tribunales inferiores mientras decide qué hará a continuación.

El alto tribunal puede fallar de muchas maneras, y los activistas a favor y en contra del derecho al aborto, así como millones de estadounidenses, están en ascuas esperando ver cómo procede.



El caso se deriva de un fallo de un juez federal en Texas, que el 7 de abril retiró la autorización de la mifepristona, aprobada por la agencia estadounidense de medicamentos FDA en 2000.

Días después, el 12 de abril, un tribunal federal de apelaciones en Nueva Orleans bloqueó la prohibición de la píldora, pero impuso duras restricciones al acceso.

El gobierno del presidente Joe Biden acudió entonces de urgencia a la Corte Suprema, que el 14 de abril mantuvo temporalmente el acceso a la píldora abortiva, una decisión que renovó el 19 de abril hasta este viernes.

– Opciones del máximo tribunal –

La Corte Suprema podría ahora congelar aún más los fallos de los tribunales inferiores en espera de una apelación del Departamento de Justicia de Biden y del fabricante de mifepristona Danco Laboratories.

También podría permitir que las sentencias que restringen el acceso a la píldora abortiva entren en vigencia mientras se desarrollan las apelaciones.

El alto tribunal también podría decidir ocuparse él mismo del caso de manera acelerada.

El caso se complica con otro desarrollo sobre los derechos reproductivos en el país. También el 7 de abril, otro tribunal federal, ubicado en el estado de Washington, dictaminó que se debe mantener el acceso a la mifepristona, en respuesta a una demanda de 17 estados estadounidenses gobernados por demócratas.

Desde que la Corte Suprema anuló en junio de 2022 el histórico fallo Roe vs. Wade, que consagraba desde 1973 el derecho constitucional al aborto, los estados quedaron en libertad para legislar sobre el tema. Más de una docena aprobaron leyes que prohíben o restringen severamente el aborto.

– Salud de las mujeres –

 

El Departamento de Justicia de la administración Biden, que encabeza la oposición al ataque legal contra la píldora abortiva, alegó que el fallo del juez de Texas se basó en una «evaluación profundamente equivocada» de la seguridad de la píldora y también cuestionó la decisión del tribunal federal de apelaciones en Nueva Orleans.

La mifepristona es un componente de un régimen de dos medicamentos que se puede usar durante las primeras 10 semanas de embarazo.

Tiene un largo historial de seguridad y la FDA estima que 5,6 millones de estadounidenses lo han usado para interrumpir embarazos desde que fue aprobado hace más de dos décadas.

El tribunal federal de apelaciones de Nueva Orleans, aunque anuló la prohibición de la mifepristona, restringió su uso a las siete semanas de embarazo, antes de las 10, y prohibió la distribución por correo.

En una presentación ante la Corte Suprema el martes, la coalición antiaborto que inició el caso contra la FDA repitió sus controvertidas afirmaciones de que el medicamento no es seguro.

La FDA y el fabricante Danco Laboratories «continuamente colocaron la política por encima de la salud de las mujeres», dijo.

Las encuestas muestran repetidamente que una clara mayoría de estadounidenses apoya el acceso al aborto seguro, a pesar de que grupos conservadores presionan para limitar el procedimiento o prohibirlo por completo.