Los servicios de seguridad rusos (FSB) afirmaron el jueves haber detenido a un activista transgénero acusado de «alta traición» en favor de Ucrania, en un momento en que los diputados rusos deben examinar un proyecto de ley que prohíbe las transiciones de género.

«El FSB frustró las actividades ilegales de un ciudadano ruso, residente en la región de Oriol, implicado en un crimen de alta traición por haber prestado ayuda financiera a las fuerzas armadas ucranianas», indicó el FSB en un comunicado.



En un video de la detención filmado por el FSB y difundido por los medios estatales rusos, hombres encapuchados y armados, con chalecos antibalas y uniformes camuflados, salen de una camioneta y golpean brutalmente al sospechoso contra una pared en la calle.

«Socorro», dijo el sospechoso, quejándose, antes de ser esposado y conducido a la camioneta.



Según el FSB, el detenido es un activista LGTB+ transgénero que trabaja como voluntaria para la ONG OVD-Info, que documenta las represiones políticas en Rusia.

El sospechoso es también el administrador de un proyecto que organizó transferencias de dinero a organizaciones en Ucrania «con el fin de financiar» el ejército ucraniano, según la misma fuente.

Está siendo investigado por «alta traición», un delito castigado con cadena perpetua en Rusia.

Esta detención se produce cuando los diputados rusos deben estudiar el jueves en segunda lectura un nuevo proyecto de ley que pretende prohibir las transiciones de género, en plena histeria conservadora antioccidental.

Desde la ofensiva en Ucrania, lanzada en febrero de 2022, las autoridades rusas multiplican las medidas conservadoras, en particular contra los LGTB+, afirmando querer eliminar comportamientos que consideran desviados y provenientes de Occidente.