Puede que nunca les hayas prestado atención, pero si vives en una ciudad con puerto o sueles viajar a destinos donde la costa es protagonista, quizás puedas explayarte explicando los diferentes símbolos y denominaciones que se encuentran presentes en el exterior de los barcos.
Comenzamos por explicar qué son las tres líneas de palabras y números que suelen aparecer en barcos como el que te mostramos sobre estas líneas. En este caso, tendríamos que hablar de:
Dueño del navío: las tres primeras letras corresponden al nombre de la empresa a la que pertenece el buque, que en el caso de la publicación correspondería al CSL Group.
Nombre del barco: después de esas tres primeras letras se encuentra el apodo con que se conoce al barco, en esta ocasión St-Laurent.
Bandera de conveniencia: indica el puerto al que pertenece el navío, en este caso hablamos del puerto de Montreal.
Número IMO: el número con el que se identifica el barco, proporcionado por la Organización Marítima Internacional.
En la parte delantera de los barcos, habitualmente denominada proa, podemos encontrar la escala de calado, tal y como puedes ver en la publicación bajo estas líneas, y el bulbo de proa, que es la protuberancia que tienen algunas embarcaciones en la proa.
Aquí es donde pueden aparecer otros símbolos, como una especie de número 3 con o sin la parte superior, que indica que se trata de un barco con bulbo, ya que a veces éste puede estar oculto, o un círculo con una cruz en el interior, que marca la existencia de un sistema de propulsión en dicho bulbo.
I
ncluso la pintura de los barcos es algo más que una mera decoración. Si alguna vez te has fijado, algunos navíos poseen la parte inferior de un color diferente al resto del barco. Esto es así debido a que esa pintura tiene una composición química diferente y está tratada para poder aguantar un mayor tiempo de contacto con el agua y soportar la corrosión.
Existe un símbolo, con forma de rectángulo con borde amarillo, que incluye dos partes, una blanca y otra roja. Para explicarlo de forma breve y sencilla, esta es la marca que deben seguir los pilotos marítimos para abordar el navío. Además, ésta suele ir acompañada de una escalera, denominada en el argot marino Escalera de Jacob, que servirá para subir y bajar del buque. Como ves, los barcos guardan secretos a la vista que poca gente conoce.