El equipo económico del Gobierno y los ejecutivos de bancos comerciales acordaron este miércoles que la reforma fiscal sólo grabará el 1% de los activos financieros y que esa tasa se mantendrá por dos años.
Ese 1% excluirá el dinero en efectivo en caja, el encaje legal de las instituciones financieras y sus inversiones en títulos del Gobierno, como son los que emiten el Banco Central y el Ministerio de Hacienda.
Este impuesto aportará al Estado unos 4,500 millones de pesos por año, por debajo de los 7,000 millones que el Ejecutivo había proyectado en su proyecto de reforma fiscal sometido al Congreso Nacional, explicó José Manuel López Valdez, presidente de la Asociación de Bancos Comerciales (ABA).
Los representantes de los bancos y los gubernamentales se reunieron en el Banco Central en busca de un acuerdo sobre el gravamen que se aplicará al sector.
Fuente:ElCaribecdn
