WASHINGTON. La mayoría de los jóvenes conductores de Estados Unidos creen que enviar mensajes de texto y hablar por teléfono al volante es peligroso, pero muchos lo hacen de todos modos, según un sondeo difundido el martes.

La encuesta de Consumer Reports a jóvenes de 16 a 21 años concluyó que aunque ocho de cada 10 creen que el uso de teléfonos inteligentes mientras se está al volante es un riesgo, un 29% admitió hacerlo en el último mes.



Y el 47% informó haber hecho una llamada telefónica sin auriculares, mientras conducía, a pesar de que casi dos tercios admitió que ese comportamiento es peligroso.

Algunos consultados dijeron haber reducido o dejado de hacer actividades que distraen la conducción, tras enterarse de sus peligros o por las leyes que prohíben el uso de teléfonos y el envío mensajes de texto al conducir. Casi el 20% conocía a alguien que había tenido un accidente causado por conductores distraídos.



La encuesta también mostró que la presión social puede frenar a quienes conducen mientras hacen otra cosa: casi la mitad dijo ser menos propenso a hablar por teléfono o enviar mensajes si sus amigos viajaban como pasajeros.

«Nuestro estudio mostró que aunque muchos jóvenes conducen haciendo actividades que los distraen, es menos probable que lo hagan cuando sus padres, amigos o hermanos les dan un buen ejemplo», dijo Rik Paul, editor de Consumer Reports.

«Animamos a todos a parar el coche en un lugar seguro si tienen que usar un teléfono celular. Y si están viajando con un conductor que usa el teléfono, pídanle que deje de hacerlo y que no juegue con su seguridad».

El informe se basó en una encuesta a 1.049 personas de entre 16 y 21 años.

La organismo que regula la seguridad del transporte en Estados Unidos ha recomendado que los 50 estados impongan una estricta prohibición al uso de teléfonos móviles -tanto de mano como de manos libres- mientras se conduce un vehículo

AFP