Nueva York. No cabe duda de que la ciencia médica puede dar oportunidades de vida a las personas, pero en el caso de Patrick Hardison, le devolvieron literalmente la sonrisa y las ganas de vivir.

Patrick fue un heróico bombero de Senatoria, Mississipi, cuyo rostro quedó completamente desfigurado en 2001 cuando el techo de una casa en llamas cayó sobre él y el fuego invadió su cuerpo, perdiendo los párpados, las orejas, los labios, la mayor parte de su nariz, el cabello y las cejas.



Cara nueva

Trece años después de recuperarse de las severas quemaduras de su cara y con 70 cirugías previas, el bombero fue sometido al trasplante de rostro más amplio y complejo practicado hasta el momento, informó el centro médico NYU Langone.



El equipo del cirujano plástico Eduardo Rodríguez (más de 100 médicos, enfermeras y personal médico), llevó a cabo la intervención de 26 horas, en la cual le devolvieron un nuevo rostro, orejas, canales auditivos, pómulos y párpados.

El donante fue David Rodebaugh, un ciclista de 26 años que falleció en un accidente vial y del cual su madre decidió donar todos sus órganos.

Así era Patrick

Así era Patrick antes de que se quemara su rostro.

Tres meses después, Harrison ha comenzado a volver a una vida normal.

Fuente Tvnotas.com.mx