Oficiales de la Policía arrestaron ayer a dos hombres a los que se les atribuye haber asesinado y descuartizado a otro y lanzado las partes de su cadáver en distintos contenedores de basura de los sectores Alma Rosa II y Villa Faro, así como en el vertedero de Cansino, en Santo Domingo Este. El sangriento crimen se registró el pasado 20 de julio y detectado el cadáver cuatro días después.

Se trata de Dawrin Díaz Soler, de 43 años, quien cumplió una condena de 10 años en la cárcel La Victoria por homicidio, y Rolando Arismendi Pérez (La Muerte), señalado como un peligroso delincuente que ejecuta personas por encargo.



La Policía dijo que ambos hombres están siendo por la muerte y descuartizamiento de Edwin Vladimir García Alberti (El Jukia), de 38 años, cuyo cadáver fue identificado por su esposa Sobeyda Gil Philipps, de 28.

En el proceso investigativo se determinó que Díaz Soler contrató los servicios de “La Muerte” para que le llevara a su casa, del sector Villa Faro, a García Alberti (Jukia), donde le infirió varias puñaladas y luego, con la cooperación de su cómplice, descuartizaron el cadáver.



Luego utilizaron un carro, propiedad de un tal “Arabe” para trasladar las partes del cadáver en distintos contenedores.

La Policía estableció, además, que al momento de ser llevado El Jukia a la casa de Díaz Soler se transportaba en una motocicleta Honda C-50, la cual al día seguimiento fue dejada abandonada por los autores del crimen en las proximidades de la avenida Padre Castellanos.

Al ser cuestionado sobre el móvil del crimen Díaz Soler dijo que actuó debido a que existía el rumor de que “El Jukia”, hoy occiso, sostenía relaciones sexuales con un pariente menor de edad.