Santo Domingo. Por solicitud de la Comisión Oficial de Exaltación del coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó al Panteón de la Patria, la Procuraduría General de la República, procedió, a través del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), a la exhumación de los supuestos restos del héroe nacional, para determinar su autenticidad por medio de una prueba de ADN.
La exhumación se llevó a cabo durante un acto que encabezaron el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, y el presidente de dicha comisión, el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez, en el cementerio de la avenida Máximo Gómez, en el Distrito Nacional.
“Este es un acto solemne para todos nosotros, y que cumple con el protocolo establecido para estos casos”, dijo el Procurador General tras el proceso de exhumación de los restos.
Destacó que primero habrá que determinar el estado en que se encuentran las partes de la osamenta, para luego analizar cada uno de los elementos encontrados y los resultados deben compararse con diferentes familiares para que el INACIF emita su posición al respecto.
Agregó que para realizar esos estudios no hay tiempo definido, y aseguró que esos exámenes se desarrollarán en el país y, en caso de ser necesario, serán llevados al exterior.
Ante la pregunta de periodistas de que si las pruebas a los restos resultaren negativas, o sea, que no correspondan a los de Caamaño, Domínguez Brito expresó que existe una disposición del Estado dominicano, y particularmente del presidente de la República, Danilo Medina, de continuar investigando hasta lograr encontrar los verdaderos restos.
El director del INACIF, Francisco Gerdo, dirigió el equipo de ese organismo, integrado por médicos forenses, antropólogos y peritos de ADN que se encargó de la extracción de parte de los restos que serán analizados para establecer si son los de Caamaño.
El coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó fue exaltado al Panteón de la Patria el pasado 24 de abril, dando cumplimiento a la Ley 4-13, del 15 de febrero de 2013, que así lo ordena. En esa oportunidad sólo fue colocada una lápida con su nombre, a la espera de confirmar mediante la prueba de ADN si los restos que reposan en el cementerio de la Máximo Gómez pertenecen al líder de la Revolución de Abril de 1965, para su traslado a ese monumento.
La comisión la integran también, Carlos Salcedo, director del Gabinete Ministerial, quien funge como coordinador, en representación del Ministerio de Cultura; Juan Daniel Balcácer, presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, y Frank Moya Pons, presidente de la Academia de Historia, entre otros.
Francisco Alberto Caamaño Deño, nació el 11 de junio de 1932 en Santo Domingo. Inicia su carrera militar en la Marina de Guerra, a la cual ingresa en 1949. Es transferido posteriormente a la Policía Nacional en 1960 con el rango de Mayor. En 1964, se unió a la conspiración dirigida por el coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez, que aspiraba a derrocar el régimen de Reid Cabral y restaurar el orden constitucional.
Al iniciarse la revuelta militar de abril de 1965, emergió como héroe cuando hizo frente a los invasores norteamericanos que mancillaron el honor de la Patria, ocupando de manera provisional la Presidencia de la República. El 3 febrero de 1973, desembarcó en playa Caracoles con un grupo de nueve hombres, en una expedición armada cuyo objetivo era derrocar el gobierno de Balaguer, siendo asesinado en Nizaíto, San José de Ocoa, junto a Heberto G. Lalane y Alfredo Pérez Vargas.
