ROMA. Los estilistas italianos Domenico Dolce y Stefano Gabbana fueron condenados este miércoles en primera instancia a un año y ocho meses de prisión por un fraude fiscal estimado en un millón de euros, indicaron los medios de comunicación.

Ambos estaban acusados de haber otorgado el control de marcas del grupo a empresas pantalla con sede en Luxemburgo para evadir impuestos en Italia.