El exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi dijo que sus hijos se sienten como las familias judías en la Alemania nazi por la persecución que sufre de parte de magistrados que quieren eliminarlo políticamente.
Estas declaraciones están incluidas en un avance, difundido hoy, del libro en el que lo entrevista el periodista de televisión Bruno Vespa.
En respuesta a una pregunta sobre si sus cinco hijos le pidieron vender su imperio mediático y dejar Italia para escapar de sus problemas legales, Berlusconi respondió: “Mis hijos dicen sentirse como las familias judías en Alemania durante el régimen de Hitler. Verdaderamente,todos están en contra nuestro”.
“Soy 100% italiano. Tengo mis raíces en Italia. Aquí fui el empresario, el deportista, el dirigente político. Es mi país, el país que amo y en el que tengo todo: mi familia, mis amigos, las empresas, la casa. Ni siquiera contemplo la posibilidad de irme de Italia”, agregó.
Su comentario sobre los judíos suscitó inmediatamente reacciones y críticas de la izquierda y sobre todo de la Unión de Comunidades Judías Italianas.
“Italia es una democracia. Alemania nazi era una dictadura sin piedad liderada por criminales que teorizaron y aplicaron graves crímenes contra la humanidad. Los nazis se encarnizaron con crueldad contra los judíos, de los que murieron seis millones al final de ese trágico periodo”, recordó Renzo Gattegna, presidente de la entidad.
“Toda comparación con lo que le ocurre a la familia Berlusconi es inapropiada y representa una ofensa a la memoria de aquellos que perdieron todos sus derechos y fueron sometidos a terribles sufrimientos, perdiendo inclusive la vida”, agregó.
“Berlusconi debería avergonzarse por esas declaraciones y pedir perdón por atreverse a hacer esa comparación”, declaró Emanuele Fiano del Partido Democrático (PD, izquierda).
“Il Cavaliere está loco, perdió todo sentido de la medida”, comentó por su parte Danilo Leva, responsable de la justicia en el PD.
Destaca Peru21 que la publicación del libro coincidiría con la votación el 27 de noviembre en el Senado de la expulsión de Berlusconi y su inhabilitación durante seis años, como prevé la llamada “ley Severino”.
