Por María Santos

Dicen por ahí que el graduarse en la UASD es graduarse doble, de la carrera que elijas y de la lucha que pasas, y créanme que lo es, puesto que los estudiantes de esta alta casa de estudios tenemos que pasar por una serie de situaciones que no parecen normales, es como si por alguna razón existiera la pre-meditación, y digo esto, por lo siguiente, la reparación de la Facultad de Humanidades inició el año pasado, para ser entregada en enero de 2015, y todo esto se hizo bajo discurso, estamos en agosto y todavía los estudiantes tenemos que estar parados fuera de la facultad para esperar un maestro. ¡Vaya usted a saber!



Clases UASD

Otro punto perjudicial al sistema es que siendo ayer lunes el inicio de clases, todavía hay estudiantes que seleccionan asignaturas justamente el día que inician la docencia, y otros que en el mejor de los casos han seleccionado una y dos materias, lo que significa un gran retraso académico, que luego implica una larga permanencia en la carrera.



Sumado a esto, es cultura ya, que algunos estudiantes y algunos maestros, se toman su semana extra para seguir con las vacaciones a pesar del llamado a clases. Para nadie es un secreto que en esta universidad existe una gran cantidad de jóvenes de escasos recursos, y que se supone que no podemos perder tiempo y aprovechar al máximo para tener una buena educación ya que de esto dependerá nuestro futuro. ¡Pero bueno! Cada quien sabe lo que hace.

Es muy lamentable que sucedan cosas como estas, en un país donde se habla de una Revolución Educativa, creo al ciento por ciento, que con un poquito de esfuerzo esto se puede mejorar, asumiendo cada quien su rol y sobre todo, con un amplio respaldo del Estado con aplicación de políticas que no solo se queden en un pedazo de papel o en la memoria de una cámara.