La tormenta tropical Erika dejó  al menos tres muertos y cuatro desaparecidos en la isla caribeña de Dominica, mientras enfilaba hacia Puerto Rico y la isla de Santo Domingo, ambas en alerta para recibir sus fuertes vientos y lluvias.

Los cuerpos de una persona mayor y dos niños fueron recuperados de un desprendimiento en la población de Good Hope, en Dominica, reportó el diario TheDominican.net, que dio cuenta de fuertes precipitaciones e inundaciones con saldo de al menos otras cuatro personas desaparecidas.



«Tenemos que prepararnos para un período de grandes desafíos», advirtió desde Santa Lucía, donde se encontraba de visita, el primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit, al hablar de cuantiosos daños en la infraestructura de la pequeña excolonia británica.
Tormenta Erika

Un helicóptero proveniente de Trinidad colabora en las labores de rescate en la zona de Petite Savanne, una de las más afectadas por las fuertes lluvias.



Dominica ha recibido más de 300 mm de lluvias, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) con sede en Miami, Florida (sureste de EEUU).

Erika tenía vientos de 75 km por hora cuando se ubicaba 280 km al oeste de la isla de Guadalupe, informó a las 21H00 GMT el NHC.

«El ojo de Erika se moverá cerca de las Islas Vírgenes más tarde, sobre o cerca de Puerto Rico en la noche y cerca o sobre República Dominicana el viernes», indicó en su último boletín.

Puerto Rico, República Dominicana, las islas Vírgenes y gran parte de las Antillas Menores en el Caribe mantenían activa una alerta de tormenta tropical. Todas esas islas soportarán precipitaciones de entre 100 y 200 milímetros, pero en algunas zonas, como en Dominica pueden llegar a 300 milímetros.

Como precaución, las autoridades de Puerto Rico, un estado libre asociado a Estados Unidos, suspendieron desde este jueves las actividades y las clases en escuelas y universidades en el este.

«Es un sistema que se espera que traiga mucha lluvia, es lo más que nos preocupa. Tenemos que estar preparados para lo peor», dijo en rueda de prensa el gobernador puertorriqueño, Alejandro García Padilla.

Casi medio millar de refugios han sido habilitados, indicó García Padilla, en una zona en la que una fuerte sequía ha llevado a un racionamiento de agua potable para millones de habitantes que podría aliviarse un poco con las lluvias.

Se espera que la potencia de Erika no varíe mucho en las próximas 48 horas, señalaron los meteorólogos estadounidenses.

Según los últimos modelos del NHC, tras pasar al norte de la Española, Erika alcanzará las Bahamas el fin de semana y podría convertirse en huracán a comienzos de la semana próxima cerca de la costa de Florida.

En medio de la incertidumbre sobre si alcanzará Florida (sureste de EEUU), el estado activó planes de contingencia y llamó a la población a prepararse, porque de todas maneras se sentirá en la región el impacto de Erika.

Danny, el primer y único huracán de la actual temporada del Atlántico, se disipó el lunes pasado al llegar al Caribe.

La Agencia Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) pronosticó que la temporada (de junio a noviembre) será menos activa de lo habitual, con entre uno y cuatro huracanes.