Santo Domingo. Las iglesias Católica y Evangélica se mostraron alarmadas por la trepidante violencia que se produce en el país y consideraron que los delincuentes le han ganado la batalla a las autoridades.



El padre Santiago Batista y el pastor Ezequiel Molina Sánchez coincidieron en que la población no soporta más las acciones de la delincuencia que se desplaza a sus anchas en prácticamente todo el país.

Batista definió el año 2016 como depresivo, violento y de pocas oportunidades para la población más pobre del país. A su juicio, el país le ha quedado grande al presidente Danilo Medina porque no ha enfrentado los temas de corrupción.



Aseguró que si el jefe de Estado «se quiere casar con la gloria» tiene que resolver los escándalos de la OISOE, los Súper Tucanos y Odebrecht.

Mientras que el pastor Ezequiel Molina Sánchez, vicepresidente del ministerio «La Batalla de la Fe», la ola de robos y atracos de los últimos días se debe al deterioro que vive la sociedad dominicana y a la falta de un cuerpo policial que cumpla con su deber.

La ciudadanía aun está sacudida por el espectacular asalto de varios millones de pesos que protagonizaron este lunes varios individuos en la sucursal del Banco Popular ubicada en la tienda Plaza Lama de la avenida 27 de Febrero con Winston Churchill en Santo Domingo.

Los asaltantes cargaron con 3,7 millones de pesos y 25.000 dólares y causaron heridas a dos agentes de seguridad, uno de los cuales se encuentra en situación crítica en el hospital Marcelino Vélez Santana.

Las máximas autoridades de seguridad del país ofrecieron una rueda de prensa, en la que aseguraron que detrás de ese crimen está el exteniente de la Policía Nacional John Percival Matos, a quien también se acusa del asalto a un camión de valores en Bella Vista Mall, hace más de tres meses.

En esa oportunidad, los criminales asesinaron a un agente de seguridad y causaron serias heridas a otro.

EFE