Samaná. Murió este lunes el hombre que le dio a tomar veneno a sus cuatro hijos la semana pasada y luego tomó de la sustancia, presuntamente por motivos pasionales.
Bernardino Mejía de 44 años, falleció mientras era conducido a Samaná luego de ser dado de alta.
Indica el portal de Noticias Telemicro que Mejía permaneció ingresado junto a tres de sus cuatro hijos a quienes se presume les dio a tomar veneno, en un jugo de naranja, luego de discutir con la esposa.
El cadáver de Mejía es velado en la residencia de su madre, y lo sepultaran en el cementerio del sector Jaimito en ese municipio costero del país.
En tanto, los niños se encuentran fuera de peligro en recuperación en hospitales de San Francisco y Santo Domingo, donde los médicos dijeron esperar puedan rebasar los efectos del veneno.
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Eso es lo que se llama un final feliz. Esa basura iba a seguir siendo un peligro para la sociedad. Ya podemos perdonarlo sin miedo a que lo vuelva a hacer.
¡QUE BUENO QUE LOS NIÑOS SIGUEN MEJORNADO . . .!
Feliz viaje… Hacia el mundo de la verdad…
De esa no te salva nadie.