Los medios de comunicación tailandeses recibieron una ola de críticas este miércoles por haber difundido imágenes del hombre que mató a su hija de 11 meses en directo por Facebook.
Según la policía, el padre, Wuttisan Wongtalay, de 20 años, decidió esta macabra puesta de escena en la turística localidad de Phuket (sur) después de haberse peleado con su esposa.
El vídeo que muestra el ahorcamiento de la bebé de 11 meses y luego el suyo propio permaneció varias horas el lunes visible antes de que Facebook lo eliminara.
Varias cadenas de televisión y otros medios de prensa tailandeses publicaron este video el martes, con el cuerpo de la niña y del hombre pixelados.
Pero el miércoles, los internautas inundaron de críticas las redes sociales y el News Broadcasting Council, el organismo que supervisa los medios de comunicación, pidió que dejara de difundirse.
«Esta cobertura era inapropiada», reaccionó el Consejo en un comunicado difundido el miércoles. «Podría dar ganas de hacer lo mismo a otras personas para atraer atención».
«Hay muchos adolescentes y niños sin discernimiento y podrían querer hacer lo mismo», se puede leer en la red social Pantip, entre otras críticas de los medios, considerados mercantiles y «preocupados por tener audiencia».
Este asesinato se produce pocos días después del de Cleveland, en Estados Unidos, donde un hombre de 37 años mató a un jubilado elegido al azar y colgó el video en Facebook. Tras tres días de persecución policial, el asesino se suicidó.
Facebook dispone de un equipo de moderadores que pueden decidir retirar los contenidos que se les señalan. Los suicidios y crímenes son tratados de manera prioritaria pero su rapidez de reacción es limitada debido a la enorme cantidad de contenidos colgados en línea cada día.
Facebook señala también que algunos videos de intentos de suicidio permitieron a las fuerzas del orden salvar vidas, como por ejemplo en enero en Tailandia.
