Santo Domingo. El cronista de arte José Rafael Sosa, indica que la actriz Georgina Duluc sigue usando su cuerpo y el morbo mediático para atraer el público a sus obras, además de puntualizar que quienes pagan por ver la puesta su nueva puesta en escena se sienten defraudados.

A continuación lo descrito por el periodista tras ver “Aló ¿Dios”? ¡Habla Eva!”



» Georgina Duluc carga con el baldón, al momento de hacer teatro de toda su estela mediática que generó por años su deliberada proyección de las apariencias, de la cual solo ella es responsable, por lo que cuando se anuncia una obra teatral en que hará el papel de Eva y se le proyecta con un reducido traje de hojas en el paraíso.



No es extraño que mucha gente condicionada asista a sus obras buscando la sugerida desnudez o que otra tanta gente la alegando que manipula su atractivo físico para transformarlo en fuerza de venta de taquillas.

Duluc genera por sí misma, una adhesión condicionada al morbo o un rechazo basado en el cuestionamiento de su acercamiento al teatro utilizando, recursos extra escénicos como un vestido de concha simulada en una de las alfombras rojas de los entonces Premios Casandra.

Con “Aló ¿Dios”?, monólogo original del dramaturgo venezolano Guillermo Canache, ha Georgina Duluc ofrece un trabajo que defrauda a quienes fueron para verla con la menor ropa posible y hace repensar a quienes la cuestionan, al realizar con entereza interpretativa, hasta donde puede hacerlo una mujer que se ha formado actoralmente, sobre la marcha.

El error que comete la producción es seguir insistiendo en el atractivo del cuerpo mediante un cartel que no representa el valor conceptual del proyecto, absolutamente respetable, al tiempo de fortalecer el prejuicio, en este caso injustificado. La Duluc nos sorprende con una obra teatral de un concepto respetable.

El monólogo plantea el cuestionamiento a Dios por las condiciones de discrimen y limitaciones en que ha creado a la mujer, lineamiento que no es nuevo, al contrario es parte de una tendencia de la dramaturgia comercial actual.

Duluc logra una actuación digna, en el marco de sus condiciones interpretativas, concita la risa y la reflexión. Ella se desdobla, dejándose ver incluso envejecida, mostrando defectos físicos y situaciones embarazosas, que no son para nada atractivas, pero naturales en el diario vivir femenino.

Equipo estelar

El equipo adaptado y cuidado por Waddy Jaquez, con dirección de Ramon Santana, dominicano (no venezolano como en oportunidades se ha difundido, debido a su residencia por años en el país sudamericano), la escenografía efectiva y sintética de Fidel López y las voces desde fuera de escena de Raeldo López , Esmeldy Chávez y Angely Báez.

El autor

El autor es Guillermo Canache es el dramaturgo, actor de teatro, cine/ televisión venezolano, iniciado en la actuación en campañas publicitarias de primer nivel, pero que ha sorprendido a superar el criterio de que era solo “gordito simpático de los anuncios”, al crear contenidos escénicos, siempre en tono de comedia, como El ultimo negro. Su “stand comedy” Canache, desnudo y sin pena.»