Desde la 5:30 de la madrugada del día de ayer técnicos de Medio Ambiente y el Zoológico Dominicano (Zoodom) comenzaron una intensa búsqueda y registro en un tramo de una cañada a fin de localizar y capturar el cocodrilo que desde hace semanas mantiene atemorizados a los residentes de un área de Barrio Nuevo, en Sabana Perdida.

El equipo compuesto por militares, biólogos, veterinarios y especialistas en cocodrilos se traslado a la cañada del referido sector para hacer un estudio de la topografía y hábitat del lugar a fin de elaborar una estrategia y luego implementar los mecanismos necesarios en busca de atrapar al reptil que supuesta habita allí.



Equipados con redes especiales, lazos corredizos y poderosas linternas, Narciso Rosario (Nacho), especialista del Zoodom con más de treinta años de experiencia en cocodrilos, junto a otros técnicos de ambas instituciones realizaban la revisión de un túnel techado de concreto en la misma cañada para verificar la presencia o no del animal.

Después de de casi cinco horas de incesante búsqueda se determinó que posiblemente se había movido del lugar.



Según los técnicos de Medio Ambiente, ni ellos ni el personal enviado por el Zoodom han podido ver al cocodrilo y tan poco han encontrado evidencias o rastros de sus existencia, hasta ahora solo se tiene la información que han dado las personas que aseguran haberlo visto, un el video que está en las redes sociales.

“Este es el peor ambiente para un cocodrilo americano vivir. Ya que no es como su bosque natural. No hemos encontrado huellas, ni rastros, pero estamos trabajando para encontrarlo y atraparlo”, expresó, Moisés Musalen, biólogo.

Topografía del área

La zona es una extensa porción de tierra húmeda y fangosa con una densa vegetación con innumerables minis cañadas formando un laberinto de aguas sucias y cloacales, llenas de plásticos y basura, que terminan en unos humedales en el río la Yuca que a su vez se conecta con el Ozama.