A cinco años de iniciar el proceso de cambio de la cédula de identidad y electoral, todavía hay 95,100 electores que no han retirado el documento oficial, a pesar de haber aportados sus datos biométricos.

La renovación del documento oficial se inició el 21 de abril del 2014 y se extendió hasta el 10 de enero del 2015, fecha en que venció la vieja cédula amarilla.



En ese entonces se ceduló un promedio de 5,255,130 personas y portaban el documento vencido un total de 2,118,438, tomando en cuenta el universo de 7,373,568 personas inscritas en el padrón. Del grupo que no logró sacar su cédula en ese período, 460,169 habían acudido a los centros de cedulación desde mayo de 2014, recibiendo tickets de servicios, pero no fueron a retirar el plástico.

Indica el periódico Diario Libre que aunque las cifras han bajado, al 16 de mayo del presente año, todavía persisten 95,100 sin acudir a buscar el documento oficial de identidad y electoral.



Estadísticas de la Junta Central Electoral (JCE) indican además que 14,009 personas que portaban todavía la cédula con plástico azul que tuvo vigencia desde 1993-1998, realizó el cambio de documento.

La actual cédula de identidad y electoral contiene información biométrica y de imágenes de reconocimiento de la identidad del ciudadano (fotografía, huellas y firma de forma digital), tendrá 10 años de vigencia. Cuenta con 23 medidas de seguridad, su impresión es ultravioleta, con la firma digitalizada.

Las proyecciones son de que el padrón electoral que actualmente es de 7,409,306 aumentará para las elecciones presidenciales del 2020 a 7,453,172 votantes.