Estados Unidos aprobó el martes la venta a Taiwán de cuatro drones armados MQ-9 Reaper por 600 millones de dólares para reforzar la defensa de la isla en medio de crecientes tensiones con Pekín.

Esta compra permitirá a Taiwán «modernizar sus fuerzas armadas y conservar creíble su capacidad de defensa», dijo el departamento de Estado estadounidense en un comunicado.

Esta es la tercera gran de armas a Taiwán que el gobierno del presidente Donald Trump aprueba en menos de tres semanas. El conjunto de esas transacciones asciende a 4.800 millones de dólares.

La venta de armas estadounidenses a Taiwán es un tema muy sensible para Pekín, que reivindica la anexión de la isla.

Pekín prometió «sanciones» a los grupos estadounidenses Boeing Defense, Lockheed Martin y Raytheon por ventas de armamento anunciadas anteriormente.

Washington rompió relaciones con Taipei en 1979 para reconocer a Pekín. Empero ese mismo año, Estados Unidos sancionó una ley que establece que Washington debe ayudar a Taiwán en caso de conflicto.

Desde entonces, Estados Unido provee armas a Taiwán.

Pekín amenaza con recurrir a la fuerza en caso de que Taipei proclame formalmente su independencia o sea escenario de una intervención extranjera. Estados Unidos quiere asegurarle a la isla un sistema creíble de defensa en caso de una eventual invasión china.