Más de 600 periodistas murieron en todo el mundo a causa del covid-19, más de la mitad de ellos en América Latina, advirtió esta semana la organización suiza Press Emblem Campaign (PEC), que pide vacunar en prioridad a los trabajadores de los medios de comunicación.

Sin embargo, la organización con sede en Ginebra indicó que no era posible diferenciar entre los periodistas que se contagiaron en su trabajo y los que se contagiaron en su vida privada.



«Debido a su profesión, los periodistas que salen a informar están particularmente expuestos al virus. Algunos de ellos, especialmente los autónomos y los fotógrafos, no pueden trabajar solo desde casa», dijo el secretario general de la PEC, Blaise Lempen, en un comunicado.

Por eso la organización pide que los periodistas sean tratados como trabajadores de primera línea y que se les dé prioridad en la vacunación, si así lo piden.



Según las estadísticas de esta oenegé, 602 periodistas murieron por covid-19 desde marzo de 2020.

América Latina encabeza la lista con más de la mitad de las víctimas (303 muertes), seguida de Asia con 145 muertes, por delante de Europa (94), América del Norte (32) y África (28).

Perú es el país con el mayor número de muertes (93 según la asociación nacional de periodistas del país. Brasil ocupa el segundo lugar con 55 víctimas, por delante de India (53), México (45), Ecuador (42) y Bangladés (41).

En Estados Unidos, hubo 31 víctimas de covid-19 en los medios de comunicación, según la oenegé.

Italia es el país europeo más afectado, con 37 periodistas muertos. En Francia, se informó de cinco muertes de Covid-19, según el comunicado.

El número real de víctimas en todo el mundo es ciertamente mayor, según PEC, porque a veces no se especifica la causa de la muerte de los periodistas o no se anuncia su muerte. Y en algunos países no hay información fiable.

El recuento del PEC se basa en la información de los medios de comunicación locales, las asociaciones nacionales de periodistas y los corresponsales regionales de la organización.

La oenegé lleva un registro del número de periodistas asesinados en el mundo cada año y desde el comienzo de la pandemia, también cuenta los periodistas muertos por covid-19.