Mientras el esposo de Lucía García está ocupado sembrando maní, ella alimenta a sus hijos con arroz en su sencilla casa con piso de arcilla. A los 19 años ya está embarazada de su tercer hijo.

En su provincia natal de Elías Piña, el 83% de la población vive en la pobreza y las tasas de mortalidad materna son muy preocupantes: unas 114 muertes por cada 100.000 nacidos vivos. La pandemia mundial de COVID-19 también está pasando factura , profundizando la pobreza y perturbando los servicios de salud.



A pesar de estos desafíos, García dice que se siente más preparada para el parto y mejor apoyada que antes.

Como muchas de las 350 mujeres embarazadas de la zona, una vez tuvo que viajar a pie por carreteras de montaña antes de llegar a la unidad de atención primaria más cercana. “Para ir al hospital, salía caminando y tenía que sentarme a descansar porque me mareaba”, explicó. Con un ingreso de menos de tres dólares diarios, no podía pagar el transporte para ir a las consultas prenatales.



Pero hoy en día, los servicios de salud son mucho más fáciles de acceder. Simplemente puede viajar en una de las nuevas motocicletas ambulancias disponibles a través del programa Champion Mothers.

Maternidad segura y saludable

El programa Champion Mothers fue lanzado en medio de la pandemia de COVID-19 por UNFPA República Dominicana, el ministerio de salud pública, el servicio nacional de salud, las autoridades locales de salud y las organizaciones comunitarias.

“Este proyecto busca prevenir y reducir la mortalidad materna. Lo que estamos ejecutando aquí en seis unidades de atención primaria de Comendador y el hospital provincial Rosa Duarte es el fortalecimiento de los servicios de salud sexual y reproductiva ”, explicó Dulce Chahín, funcionaria de salud reproductiva del UNFPA. Comendador es la capital de Elías Piña y el sitio del hospital provincial.

Estos servicios son muy necesarios, dijo la Dra. Marina Cordero, quien trabaja en la unidad de atención primaria de Rinconcito, a 10 km de Comendador. Muchas mujeres embarazadas de la zona tienen dificultades para acceder a la atención prenatal debido a la distancia y el terreno. En los últimos meses de 2020, tres mujeres embarazadas murieron porque no pudieron acceder a la atención de emergencia a tiempo, dijo el Dr. Cordero.

El equipo médico inadecuado y la escasez de proveedores de salud solo agravaron el problema.

La iniciativa Champion Mothers está trabajando para abordar todos estos problemas. Además de contar con una flota de seis motociclistas, el programa también ha capacitado a más de 100 técnicos y personal sanitario, y ha dotado de nuevo equipamiento médico a 10 centros de atención primaria del municipio de Comendador.

Las unidades de atención primaria también se han equipado con teléfonos móviles y tabletas con datos ilimitados, lo que permite a los trabajadores de la salud controlar la salud de las mujeres embarazadas, brindar asesoramiento y buscar atención especializada cuando surgen dudas o complicaciones.

Para abordar la creciente inseguridad financiera causada por la pandemia, Champion Mothers también está entregando paquetes de alimentos a las mujeres embarazadas, para garantizar que reciban una nutrición adecuada, y está proporcionando 350 kits posnatales que contienen pañales, toallas sanitarias, desinfectantes de manos y mascarillas.

Además, la continuidad de los servicios de apoyo para sobrevivientes de violencia de género también se está fomentando en el contexto del proyecto Champion Mothers.

Enfrentando el embarazo adolescente

El proyecto también apunta a otra preocupación: las tasas persistentemente altas de embarazo adolescente, que pueden perturbar la educación de las niñas y aumentar su vulnerabilidad a la pobreza y la violencia.

Se están ampliando el asesoramiento y los servicios de planificación familiar. Actualmente se distribuyen cantidades importantes de condones masculinos y femeninos en cada una de las 17 unidades de atención primaria de la provincia, así como en los hospitales locales. Se han establecido diecisiete «casas clave»; Estos son lugares donde los líderes comunitarios, que han sido capacitados en consejería en planificación familiar y que brindan información sobre salud sexual y reproductiva sin prejuicios, pueden proporcionar condones y otros servicios de planificación familiar.

Estos servicios no solo ayudarán a prevenir embarazos no deseados. “Vamos a reducir las enfermedades de transmisión sexual”, dijo Elsa Fortuna, gerente del Área de Salud 3 de Elías Piña.

En cuanto a Lucía García, pudo visitar la unidad primaria de salud Pinzón para una de sus últimas citas de atención prenatal. Allí, la doctora Esterlina Barrientos le midió la barriga y le aseguró que el embarazo iba bien. La Dra. Barrientos dice que se ha beneficiado de los dos talleres de capacitación a los que asistió recientemente, uno sobre planificación familiar y otro sobre atención obstétrica.

“Como residente, me alegra saber que proyectos como este ayudan a la comunidad”, dijo.

Cuando llegue el momento de dar a luz, Lucía podrá llamar a una moto ambulancia para ser trasladada a un centro de salud mejor equipado, con médicos más capacitados y así tener un parto seguro.