China estaba bajo presión este miércoles después de que el jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reviviera la teoría de que el covid-19 podría haberse escapado de un laboratorio chino.

En una rueda de prensa, Liang Wannian, jefe de la delegación de científicos chinos que colaboraron en el informe de los expertos designados por la OMS sobre el origen del coronavirus, expresó su incomprensión por las declaraciones de Tedros Adhanom Ghebreyesus.



«No entiendo su visión de las cosas porque es un área que nos afecta a nosotros los científicos», dijo.

Tampoco comentó la petición del jefe de la OMS de enviar una nueva misión de investigación al país, asegurando únicamente que los investigadores chinos seguirían colaborando con sus colegas extranjeros.



El jefe de la OMS, que ha sido acusado de ser demasiado complaciente con Pekín, sorprendió el martes al pedir que se investigue más la teoría de que el coronavirus podría haberse escapado del Instituto de Virología de Wuhan, la ciudad del centro de China donde el covid-19 apareció a finales de 2019.

En su informe publicado esta semana, los expertos internacionales enviados a Wuhan por la OMS en enero prácticamente lo descartan, calificando de «extremadamente improbable» que el virus proceda de un laboratorio.

En otra rueda de prensa, la portavoz del ministerio de Exteriores chino, Hua Chunying, repitió esa parte del informe.

«Ellos [los expertos] creen que una fuga en el laboratorio de Wuhan es extremadamente improbable», afirmó.

También pidió a la comunidad científica que investigue en otras partes del mundo, no solo en China.

La tesis de que el virus salió de ese laboratorio de Wuhan fue defendida firmemente por la administración estadounidense del presidente Donald Trump, basándose en información de inteligencia.

China siempre negó esta posibilidad.