Mientras el presidente sale hacia Nueva York en un vuelo comercial bajo el alegato de que desea ahorrar recursos para el Estado, desde el Ministerio de Energía y Minas se anuncia una licitación para el montaje de un evento que incluye los servicios de catering, en la que se pretende gastar RD$4,785,844.



Sumado a esto, hace una semana que desde el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes se lanzaron por la borda 32 millones de pesos, solo para que sus empleados puedan ordenar sus almuerzos vía una plataforma web.

Ni hablar de los 17 millones que gastó el Ministerio de Obras Públicas en un evento para rendir cuentas tras un año de gestión y la colocación publicitaria a un medio que no existía al momento de emitir una orden de compra.



¿Entonces de qué austeridad hablamos, de qué sirve que un día el presidente se ahorre unos pocos miles de dólares cuando sus funcionarios están desbaratando el erario?.