Washington, Estados Unidos. Robert F. Kennedy Jr, hijo del candidato presidencial estadounidense asesinado en 1968, y otros activistas anti-vacunas presentaron una demanda contra varias organizaciones de noticias que se unieron para luchar contra la desinformación.

La querella de casi 100 páginas, presentada esta semana ante un Tribunal de Distrito en Texas, en el sur de Estados Unidos, acusa a los medios de comunicación y a las empresas de redes sociales de colusión para censurar a otros editores en línea con narrativas alternativas sobre el covid.



Además de Kennedy, entre los demandantes figuran su organización Children’s Health Defense (Defensa de la Salud Infantil), organizaciones de noticias que han promovido teorías contra las vacunas y médicos que son escépticos sobre el covid y las vacunas.

Los demandados nombrados en la querella son The Washington Post, la BBC, Associated Press y Reuters. Esos medios integran la Iniciativa de Noticias Confiables (Trusted News Initiative, TNI), una asociación entre organizaciones de prensa y empresas de tecnología como Facebook, Google, Twitter, YouTube y LinkedIn.



La Agence France-Presse (AFP) también es miembro de TNI, cuyo objetivo declarado es «abordar la desinformación dañina».

La demanda acusa a las empresas de medios de colaborar para «excluir» a los editores de noticias rivales cuyo trabajo «desafía y compite con los informes de los miembros de la TNI sobre ciertos temas relacionados con el covid-19 y la política estadounidense».

«La ley federal antimonopolio tiene un nombre propio para este tipo de ‘asociación industrial’: se llama ‘boicot grupal'», señala la denuncia.

Afirma que los demandantes han sido «censurados, desmonetizados, degradados, silenciados, bloqueados y/o excluidos por completo de plataformas como Facebook, YouTube, Twitter, Instagram y LinkedIn».

«Si bien la ‘Iniciativa de Noticias Confiables’ pretende públicamente ser una autoproclamada ‘policía de la verdad’ que extirpa la ‘información errónea’ en línea, de hecho ha suprimido informes totalmente precisos y legítimos para promover el interés económico propio de sus miembros», alega la demanda.

Kennedy, de 68 años, cuyo padre homónimo fue asesinado en 1968 mientras hacía campaña por la nominación presidencial demócrata, se convirtió en el rostro del movimiento antivacunas tras promover la teoría de que las vacunas causan autismo.

Los demandantes buscan un juicio con jurado, daños no especificados y una orden que impida a TNI «continuar trabajando con compañías de Internet para boicotear y censurar a otros editores de noticias en línea».