Participación Ciudadana llamó la atención del Gobierno, los partidos, los órganos electorales y el público en general, acerca de lo que ha sido un tema tan recurrente como inadmisible, consistente en el uso de los recursos públicos para campaña.



Indica la entidad sin fines de lucro mediante un comunicado de prensa que se trata del aprovechamiento del poder público para fines privados; es decir, de corrupción. En particular, destaca el uso abusivo de la publicidad estatal para resaltar la figura presidencial o de determinados funcionarios, promocionando supuestos logros, instituciones y obras de infraestructura que no ameritan propaganda, debido a que no conllevan valor de mercado para el consumidor.