El Estado alemán planea quemar al menos 755 millones de mascarillas con fecha de caducidad vencida, originalmente adquiridas para prevenir el contagio de coronavirus, informó hoy el periódico «Welt».

Fuentes del Ministerio de Salud alemán citadas por el diario indicaron que se destruirán mascarillas quirúrgicas y del tipo FFP2.



Las licitaciones correspondientes para empresas de eliminación ya se habían anunciado en octubre y, según el periódico, las empresas podían presentarse hasta finales de mayo.

Un portavoz del citado ministerio declaró al periódico que unos tres millones de mascarillas ya fueron incineradas previamente.



La mayoría de los estados federados alemanes también tiene previsto deshacerse de las mascarillas contra el coronavirus que ya no sirven, o ya lo han hecho, según una encuesta realizada por el diario «Welt» entre los ministerios de Salud de los distintos estados federados.

La portavoz de temas político-sanitarios del Partido La Izquierda en el Bundestag (Cámara baja parlamentaria alemana), Kathrin Vogler, cuestionó la quema de mascarillas al considerar que el excedente tras el fin de la obligación de utilizarlas era previsible.

La parlamentaria opinó que el Ministerio de Salud debería haber entregado gratuitamente las mascarillas a las consultas médicas, los hospitales u otras instituciones sanitarias con tiempo suficiente para que no tuvieran que pedir más.

En vista de la escasez de mascarillas al principio de la pandemia de coronavirus, el Ministerio de Salud, a cargo entonces del ministro Jens Spahn, compró varios miles de millones de mascarillas en la primavera de 2020.

El Tribunal Federal de Cuentas denunció posteriormente un «exceso de compras masivo». La corte precisó que se trató en total de unos 5.800 millones de mascarillas, con gastos por 6.300 millones de euros (casi 6.900 millones de dólares).

Fuente DPA- German Today