Esta voz aislada y nacida de una perspectiva tan pequeña como la de un periodista que se resiste a la indolencia, sigo diciendo que la comunidad mundial se sigue torturando cada día con las escenas en “streaming” que nos deberían llenar de vergüenza incluyendo al más indolente de los seres humanos. Y así, no puede ser. Alguna salida hay que buscar.

El Derecho Internacional Humanitario (DIH) es un conjunto de normas que, por razones humanitarias, trata de limitar los efectos de los conflictos armados. Protege a las personas que no participan o que ya no participan en los combates y limita los medios y métodos de hacer la guerra.



El DIH suele llamarse también «derecho de la guerra» y «derecho de los conflictos armados», un marco jurídico que tanto Israel como Hamas violan cada uno su particular modo de hacerlo.

El Derecho Internacional Humanitario, conocido como la Ley de Guerra, es una legislación internacional para proteger a los civiles de ser convertidos en blancos por los ejércitos en lucha. Esta idea moderna, surgió tras la mortal batalla de Solferino (1859), Lobardía, en lo que hoy es Italia. Esa batalla fue particularmente agotadora, duró más de nueve horas y resultó en la muerte de más de 2.386 soldados austriacos, 10.807 heridos y 8.638 desaparecidos o capturados.



Los ejércitos aliados también sufrieron un total de 2.492 muertos, 12.512 heridos y 2.922 capturados o desaparecidos. Esto evidenció la necesidad de regular la guerra para que no afectara a quienes no eran combatientes. El impacto de tanta crueldad, llevó a pensar en aprobar códigos legales de aplicación para todos los países.

De esa batalla, hoy casi olvidada por las actuales generaciones X, Z o 5-G, sale el primer Tratado de Derecho Internacional Humanitario y que se supone que sigue teniendo vigencia el pensamiento y acción humanista de Henry Dunant para enfrentar los desafíos actuales y promover el respeto del Derecho Internacional Humanitario.

Hoy día, la opinión pública mundial que observa horrorizada el desarrollo de la guerra entre Israel y Hamas, por los excesos que se están cometiendo contra la población civil de parte y parte y respecto de los cuales, las proclamas para que sean detenidos, de nada han valido, no importa la calidad o estatura de quien lo demanda.

Ni Naciones Unidas, ni los líderes mundiales religiosos, ni jefes de Estado que han pedido al menos “pausas humanitarias” o “treguas” para permitir ceses al fuego. Israel está guiado mas por un sentido de venganza que por una directriz bélica contra el aparato militar de los terroristas.

El mundo está sintiendo que nada puede detener este espectáculo de muerte por parte de dos bandos que de alguna forma coinciden, pese a sus diferencias, porque en términos de actitudes, Hamas e Israel cometen las atrocidades, aun cuando sea en función expresiones distintas: un desnivel en cantidad de muertos y heridos, pero en el fondo, pero el ritual es el mismo.

Israel bombardea hospitales y ambulancias, y Hamas lanza tres mil cohetes sobre ciudades hebreas en las que viven civiles, incluyendo niños, secuestra rehenes y su número de asesinatos es un poco menor. ¿Eso transforma a Hamas en menos asesina que a Israel?

¿Técnicamente, como violan Hamas e Israel coinciden en violar, el Derecho Internacional Humanitario?

Estas son algunas de las acciones que ambas partes enfrentadas, están desarrollando: Dirigir ataques o atacar, con cualquier medio, ciudades, viviendas o edificios que no sean objetivos militares; cometer actos de violencia contra la vida de personas y en particular asesinatos de todo tipo, violaciones, tratos crueles o torturas y dirigir ataques contra misiones de asistencia humanitaria, como las de ONU, la Cruz Roja, la Media Luna Roja o personal médico, o la captura y/o retención de rehenes.

Respecto de los prisioneros, se debe respetar: Su vida y su dignidad y está prohibido matar o herir a un combatiente que se ha rendido: En cuanto a territorios ocupados (como es el caso de Gaza), está prohibido, que la potencia ocupante, traslade a toda o a parte de la población al territorio que ocupa.

Otras restricciones del DIH, prohíben armas que no distingan entre combatientes y civiles (como el caso de las armas químicas); el ejército israelí ha bombardeado Gaza arrasando barrios enteros, ha matado a miles de civiles, la mayoría menores de edad. Ya con más de 10 .400 las victimas civiles. Ya son 35 los periodistas muertos en el ejercicio de sus funciones, 31 de ellos palestinos. ¿Quién paga esa sangre?

También ha pedido a los ciudadanos del norte de Gaza que se trasladen al sur, pero la Cruz Roja y la Media Luna Roja, han rechazado esos ataques, y la toma de rehenes por parte de Hamas, pero al mismo tiempo han destacado que las orientaciones de Israel para que los gaznatíes abandonen su ciudad, no son compatibles con el Derecho Internacional humanitario.

El gobierno de Gaza acusa a Israel de llevar a cabo una “limpieza étnica” y desarrollar traslados forzosos, lo cual está considerado por expertos como un retroceso de 80 años en materia de respeto del derecho humanitario.

La Corte Penal Internacional es el principal órgano de exigir el respeto del Derecho Internacional Humanitario. Ya en 2021 este tribunal anunció que iniciaba una investigación en los territorios palestinos, tanto contra Israel como contra Hamas, pero ambos rechazaron el dictamen y Tel Avid se negó a cooperar con el fiscal a cargo del caso.

Pero no es un proceso para probar esos crímenes de guerra no es simple y expedito. Es complejo y laborioso y llegar a conclusiones y normalmente suele demandar décadas para ser demostrado.

Lo más grave, al entendido de los expertos jurídicos que imposibilita o dificulta juzgar crímenes de guerra, es que se debe probar que los ataques contra civiles, fueron intencionales y el Derecho Internacional Humanitario.

Se trata de una gran falla porque no obliga los estados a ofrecer explicaciones de sus acciones militares, por lo cual es difícil probar si esas acciones contra civiles fueron un error o fueron deliberadamente provocados”. Algunos expertos consideran que existe un doble rasero respeto de la política internacional para investigar ciertos crímenes.

Los convenios internacionales actuales, aun que han sido establecidos para proteger a los civiles de la barbarie de la guerra, tienen muchos vacíos y las decisiones finales siguen en poder de quienes empuñan las armas.

Con lo que se quedan los foros internacionales, los organismos de derechos humanos, es la consumación impune por parte de las dos partes enfrentadas, de las mismas violaciones de los derechos humanos, mientras buena parte de la población tiene que seguirse torturando con las escenas que llenan de vergüenza al mas indolente de los seres humanos. Y así, no puede ser. Alguna salida hay que buscar.