El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, prometió este jueves reconstruir en poco tiempo el puerto de Acapulco, un mes después de que el huracán Otis devastara la ciudad dejando 50 muertos y decenas de edificios destruidos.

«Queremos hacerlo en muy poco tiempo, que podamos tener las casas nuevas, rehabilitadas, pintadas, de los colores que nos gustan en el trópico, en la costa, colores alegres», dijo el mandatario en su habitual rueda de prensa, que se realizó en esa ciudad del Pacífico mexicano (Guerrero, sur).



El huracán Otis, que impactó en octubre Acapulco como categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson, dejó una estela de destrucción en la ciudad de 780.000 habitantes, que vive principalmente del turismo.

López Obrador detalló que su gobierno otorgará apoyos directos a las familias para la reconstrucción de unas 250.000 viviendas que quedaron dañadas tras el paso de Otis.



«Tenemos que participar todas y todos para reconstruir las casas lo más pronto posible. Imagínense, el gobierno construyendo 250.000 o reconstruyendo 250.000 viviendas, ¿cuándo terminamos?», dijo.

El mandatario añadió que su gobierno tiene suficientes recursos para la reconstrucción del puerto, uno de los destinos vacacionales más importantes de México.

«No vamos a limitarnos en presupuesto, hay dinero suficiente, lo que se necesite, no hay techo financiero, lo que se requiera para rehabilitar a Acapulco y mejorar la situación de su pueblo», dijo.

Por su parte, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, dijo que hasta el momento hay unas 50 personas fallecidas y otras 30 desaparecidas tras el paso de Otis.

López Obrador señaló que este jueves su gobierno realizará un homenaje a los fallecidos.

En la misma rueda de prensa, Antonio Hernández, presidente de Mundo Imperial, uno de los grupos hoteleros más importantes del lugar, dijo que hasta el momento hay una oferta hotelera del 4%, que se espera llegue al 20% en diciembre, una de las temporadas turísticas más importantes para Acapulco.

A inicios de noviembre, el gobierno de López Obrador anunció un plan de apoyo por unos 3.500 millones de dólares para los damnificados por el huracán, en medio de reclamos de los habitantes por una lenta respuesta oficial al desastre.