ESPAÑA.- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comunicó finalmente este lunes 29 de abril que continúa en el cargo, tras una pausa de cinco días para «reflexionar» si continuaba o no en su cargo, tras el acoso que, afirma, sufre su familia, y en concreto su esposa, por parte de sus adversarios políticos.

«Esta decisión no supone un punto seguido es un punto y aparte, se los garantizo», aseguró.



“He decidido seguir, seguir con más fuerza si cabe al frente de la Presidencia de España. Esto no es un punto seguido, es un punto y aparte”, afirmó Sánchez.

En su discurso para comunicar la decisión, el líder del PSOE explicó que su reflexión se debió a una cuestión personal y no política, dada la necesidad de evaluar si valía la pena o no soportar el acoso por parte de la ultraderecha hacia su familia.



Sin embargo, señaló que las masivas movilizaciones que se produjeron el fin de semana por parte de sus simpatizantes y su partido político influyeron en su decisión de continuar.

“Mi mujer y yo sabemos que esta campaña de descrédito no parará, llevamos diez años sufriéndola, es grave, pero no es relevante, podemos con ella, lo verdaderamente trascendente es que queremos agradecer las muestras de solidaridad, empatía de todos los ámbitos, agradecimiento especial a mi partido socialista”, señaló.

Sánchez advirtió que es hora de parar las acciones contra las familias de los líderes políticos que cataloga como acoso. “No es una cuestión ideológica, estamos hablando de respeto, dignidad, de principios que van más allá de las decisiones políticas y nos definen como sociedad (…) Si permitimos que se vuelva a relegar a la mujer al oficio doméstico, teniendo que sacrificar su carrera profesional en beneficio de la de su marido, habremos hecho un daño irreparable”, enfatizó el líder socialista.

Este desenlace llega luego de que el pasado jueves 25 de abril, Sánchez emitiera una carta pública en la que señalaba que tomaba una pausa para definir si seguía o no al frente del Gobierno, que finalmente comunicaría este lunes.

Esa decisión se produjo tras las acusaciones del sindicato de ultraderecha, Manos Limpias, contra la esposa de Sánchez por las que el Tribunal de Madrid abrió el pasado jueves una investigación contra Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias, supuestamente a favor de empresarios que se presentaban a licitaciones públicas”.

No obstante, Manos Limpias señaló que basó su denuncia en reportes periodísticos