Problemas de erección a los 35 años; lo que dice el urólogo

En una entrevista en el programa «El Despertador» transmitido por Color Visión y el canal de YouTube del Grupo de Noticias SIN, el urólogo Pablo Mateo abordó un problema creciente entre los hombres: los problemas de erección a partir de los 35 años.

En sus declaraciones subrayó la importancia de adoptar hábitos de vida saludables y la necesidad de una educación sexual adecuada para prevenir y tratar esta condición.

La importancia de cuidar la salud desde los 35 Años

El Dr. Mateo explicó que, aunque a los 35 años aún se considera a la persona joven, esta edad representa la mitad de la vida promedio. «Tenemos que empezar a cuidar la alimentación y a tener un sueño adecuado», afirmó.

El especialista destacó que hábitos como el consumo de cigarrillos, vapeo y hookah tienen un impacto negativo en la salud sexual. «Los lunes y martes veo con frecuencia a jóvenes que fueron a la discoteca, tomaron varios tragos y luego no pudieron tener una erección», dijo Mateo. Este tipo de situaciones, explicó, puede iniciar un proceso psicológico negativo que afecta la autoestima y la capacidad eréctil futura.

También dijo que afecta la erección el uso de la testosterona sin criterio médico, lo cual puede dañar los testículos y, en consecuencia, afectar la función eréctil y la fertilidad.

Recomendaciones para una vida sexual saludable

Para prevenir problemas de erección, el Dr. Mateo recomendó hacer ejercicio de manera adecuada, dormir entre siete y ocho horas, y evitar el consumo excesivo de alcohol, cigarrillos, vapeo y hookah. «El vapeo hace más daño que el cigarrillo. Todo eso afecta el sistema circulatorio y el sistema nervioso», advirtió.

Finalmente, el especialista subrayó que si un hombre sigue estas recomendaciones y aún tiene problemas de erección, es necesario realizar una evaluación sistémica para identificar posibles causas subyacentes. «Hay que hacer una evaluación», concluyó.

Las declaraciones del Dr. Pablo Mateo llaman a la reflexión sobre la importancia de adoptar hábitos saludables y la necesidad de una educación sexual que prepare a los jóvenes para una vida sexual plena y satisfactoria.