En medio de la investigación por la desaparición de una turista estadounidense de origen indio en un hotel de Punta Cana, el reconocido abogado criminalista Pedro José Duarte Canaán ha compartido su análisis sobre el caso, destacando las fallas en el sistema de seguridad y justicia del país.
La joven, de 20 años y estudiante de la Universidad de Pittsburgh, desapareció en la madrugada del jueves pasado después de ser vista por última vez en la playa del complejo hotelero. Las autoridades, incluyendo la Policía Nacional, el FBI y el Ministerio Público, han desplegado un operativo de búsqueda por aire, mar y tierra, pero hasta el momento no se han encontrado rastros de la turista.
Duarte Canaán, con más de 40 años de experiencia en el campo del derecho penal y la criminología, criticó duramente la falta de avances en la investigación. «Este es el país más inseguro de América Latina. Aquí no hay tecnología de punta, no hay una ley que proteja a los desaparecidos, y nuestras instituciones están contaminadas y desprestigiadas», afirmó el abogado.
El criminalista destacó que el principal sospechoso en el caso es el joven estadounidense que acompañaba a la turista la noche de su desaparición. Según Duarte Canaán, este individuo ha proporcionado tres versiones diferentes de los hechos, lo que aumenta las sospechas sobre su posible participación. «Si este joven hubiese sido dominicano, ya le hubiesen dado dos golpizas y le arrancarían una confesión. Pero como es norteamericano, se le preservan todos sus derechos», señaló.
Además, el abogado cuestionó la hipótesis de que la joven haya sido arrastrada por las olas, calificándola de «frágil». En su lugar, sugirió que podrían estar involucradas «manos criminales» y que el caso podría estar relacionado con un posible rapto o un encuentro violento. «El despliegue que se ha hecho hasta ahora debería haber arrojado algún vestigio contundente. La hipótesis del mar es poco probable», afirmó.
Duarte Canaán también criticó la falta de transparencia en la investigación y la posible influencia de intereses económicos en el caso. «Estamos hablando de un complejo hotelero multimillonario. Hasta qué punto las agencias dominicanas están dispuestas a profundizar en la responsabilidad civil del hotel», cuestionó. Asimismo, destacó la importancia de que el gobierno contrate especialistas bilingües para defender la imagen del país ante la cobertura internacional del caso, que ha generado alertas sobre la seguridad en la República Dominicana.
El abogado concluyó su intervención con un llamado a las autoridades para que mejoren las políticas de seguridad y protejan a los ciudadanos y turistas por igual. «No tenemos una ley de alerta ámbar, no hay tecnología de punta, y nuestras instituciones están corrompidas. Este caso debe ser un punto de inflexión para cambiar esta realidad», afirmó.
Mientras tanto, la familia de la joven continúa esperando respuestas, y la presión internacional sigue aumentando. La embajada de Estados Unidos y la de India están monitoreando de cerca el desarrollo de la investigación, en un caso que ha puesto en evidencia las debilidades del sistema de seguridad y justicia en la República Dominicana.