Los Astilleros Navales de Santo Domingo Este han adoptado medidas especiales para controlar el lanzamiento de desechos sólidos y aguas residuales en el río Ozama, en una acción coordinada con el Ayuntamiento del Municipio y con las comunidades de la zona. La gerente de medio ambiente de los astilleros, bióloga Nilda Montás explicó que las medidas de saneamiento se corresponden con los esfuerzos desarrollados por el ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, bajo la gestión del doctor Jaime David Fernández Mirabal, para controlar las descargas industriales que afectan el río Ozama, como parte de su programa de rescate del Cinturón Verde de Santo Domingo.



Los Astilleros Navales de Santo Domingo Este que operan en las antiguas instalaciones del Dique de Felix Benítez Rexach en la margen oriental del río, que se encontraban en total estado de abandono y fueron rescatados y convertidos en una productiva empresa de servicios generadora de empleos con una inversión superior a los cien millones de pesos, para la reparación de embarcaciones y otros servicios similares.

La licenciada Montás dijo que el plan ambiental de la empresa naval se diseñó en base a cuatro actividades fundamentales que incluyen el manejo de la cañada que atraviesa los barrios del entorno y los terrenos de la empresa, la erradicación de los vertederos comunitarios irregulares, la Canalización de aguas negras y pluviales y el manejo de desechos Industriales.



Explicó que los vertederos improvisados en las vecindades cercanas al río operaban como una fuente de contaminación permanente, produciendo un lixiviado fruto de la putrefacción de cadáveres de animales y heces fecales que descargaban en las aguas.

“Estos vertederos eran utilizados para cría de animales como cerdos, gallinas y chivos.

Las condiciones se agravaban con el establecimiento por parte de los moradores de pocilgas al descuido sin ninguna regulación. Donde se criaban animales enfermos y afectados por parásitos que contaminaban las instalaciones con excrementos y orina. Dentro de las instalaciones se encontraban cuatro pocilgas que fueron eliminadas como parte del saneamiento de los terrenos”.

Señaló que las aguas negras provenientes de las comunidades establecidas alrededor del dique operaban fuera de toda regulación, circulando por tuberías improvisadas que, aprovechaban la pendiente, descargaban en las áreas de operación de los Astilleros. Informó que la empresa ha construido drenajes para canalizar las aguas residuales hasta una planta para ser tratadas antes de ser vertidos al río.

Afirmó que las descargas industriales y los asentamientos humanos descontrolados han sido los principales factores de contaminación del Ozama, y consideró que será necesario ampliar los planes que se realizan en este entorno para lograr mayor controlar del impacto de esas actividades en la zona.

A su juicio, “los barrios próximos al río construidos sin planificación representan uno de los grandes retos que plantea el rescate del río Ozama, ya que muchas de esas comunidades carecen de las vías de acceso y los equipamientos necesarios para el manejo de los desperdicios sólidos y las aguas residuales”.
Fuente:DiarioDigital.com.do