Los que hoy pierden el sueño porque temen que en el año 2012 el mundo llegará a su fin, ya sea debido a una alineación planetaria o por la conclusión milenaria del calendario Maya, ahora tienen una nueva amenaza apocalíptica de qué preocuparse: El Día del Juicio Final, que llegará -supuestamente- el próximo 21 de mayo. Esto es al menos lo que pronostica Harold Camping, un prominente líder cristiano que se escucha en más de 150 estaciones de radio en Estados Unidos, y que asegura haber descifrado códigos cronológicos impresos en la Santa Biblia.



Lo peor es que, según los cálculos matemáticos de Camping, lo que ocurrirá el 21 de mayo de 2011 sería sólo el principio del fin… De acuerdo con su «interpretación bíblica», cinco meses más tarde (el 21 de octubre de 2011), el Mundo que hoy conocemos dejará de existir por completo.

Camping, sin embargo, no quiere que su nefasto «descubrimiento» se quede en secreto. Por eso el Family Radio Worldwide (la red de estaciones radiales que preside desde los años 1960s), junto con la organización cristiana EBible Fellowship, han lanzado una intensa campaña mediática que alcanza a 119 países y busca convencer a la ciudadanía a que se arrepiente en preparación para el fin, el próximo 21 de mayo.



«Es la segunda venida de Jesús, el Día del Juicio Final», explicó Tom Evans, portavoz de Family Radio Worlwide, en entrevista telefónica con Univision.com. «El señor Camping obtuvo esta fecha basado en interpretación de la Biblia».

Camping insiste que su pronóstico no fallará y que esta vez sus cálculos apocalípticos son exactos. Y es que el líder religioso de 89 años y quien vive cerca de Oakland, California, ya se equivocó en 1994 cuando pronosticó por primera vez el mundo llegaría a su fin.

Creyentes y seguidores por todo el Mundo

Pero pese a su fallido vaticinio hace 17 años, Camping y sus seguidores no están solos. El temor apocalíptico ha hecho que en muchas ciudades de Estados Unidos se hayan colocado vallas publicitarias anunciando el fin; como la localizada en la intersección de la calle 24 y Osborn Road, en Phoenix, Arizona, entre otras.

Mientras tanto, a lo largo y ancho del país han surgido múltiples grupos religiosos (como los creadores de la página de internet WeCanKnow.com), que apoyan el esfuerzo de llevar la Palabra de Dios y avisarle al mundo que «éste ha llegado a su fin y es hora de arrepentirse».

«Ese día el mundo será testigo de un terremoto global… El sismo más grande jamás visto en la historia», enfatizó a Univision.com el activista Chris McCann, quien en julio de 2008 renunció de su trabajo como administrador de fondos mutuos para dedicarse tiempo completo al EBible Fellowship.

«La Biblia dice que ese es el Día del Juicio, el Día de la Resurrección y… los que no se hayan arrepentido, se quedarán atrás», continuó McCann, citando versos del Capítulo 16 del Apocalipsis de San Juan.

La salvación está en tus manos

McCann aclaró, sin embargo, que el 21 de mayo de 2011 no tiene que ser un día negativo: «La salvación está en manos del hombre y lo único que hay que hacer es aceptar a Jesús en el corazón».

«Antes de ese día, hace falta establecer una buena relación con Dios», añadió el activista religioso. «Tenemos que examinar nuestra fe y en especial, darle una vista honesta a nuestro comportamiento ante el Todopoderoso».

McCann describió su misión como la de los meteorólogos: «Cuando se emite una alerta de huracán, un estado de emergencia inminente, muchas personas ignoran ese aviso y por eso nuestro mensaje de arrepentimiento es más difícil de comunicar».

«Lo que viene el 21 de mayo de 2011», aclaró el religioso, «no es algo físico como un huracán. Hay gente que sí le cree a los meteorólogos y se preparan para la tormenta, pero son pocos los que le creen a los líderes espirituales que alertan al mundo sobre el Día del Juicio Final… A pesar de nuestros esfuerzos de amor, muchos ignorarán el mensaje de la salvación».

El pronóstico de Camping señala que luego del devastador sismo augurado para el 21 de mayo, los creyentes vivos serán llevados al cielo junto con todos los fallecidos que perecieron con la fe en Cristo, en un hecho que será presenciado por todas las naciones del Mundo.

«Seremos testigo de muchos yéndose al cielo, y los que no se hayan arrepentido se quedarán atrás», destacó McCann. «Entonces empezará un largo y doloroso proceso de tribulaciones donde el sufrimiento será tan grande que todos los que permanecieron desearán estar muertos».

Ese último comentario, señaló McCann, lo hace basándose en lo que dice en los versículos 5 y 6 del Capítulo 9 del Apocalípsis: «Se les mandó que no los matasen, sino que fuesen atormentados por cinco meses. Su tormento era como el tormento del escorpión cuando pica al hombre. En aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero de ninguna manera la hallarán. Anhelarán morir, y la muerte huirá de ellos».

Fuente:Univision.com