SANTO DOMINGO. La suspensión de Miguel Vargas Maldonado, como presidente del Partido Revolucionario Dominicano, y de tres dirigentes de esa organización seguidores suyos, así como la expulsión de otros siete por la Comisión Política encabezada por Hipólito Mejía, fue dejada sin efecto ayer por el Tribunal Superior Electoral (TSE).
La alta corte también suspendió la convocatoria y celebración de la reunión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de la organización, convocada para mañana, a las 10:00 am, por la corriente de Mejía.
Los jueces Mariano Rodríguez, presidente del TSE; Mabel Féliz Báez, John Guiliani, José Manuel Hernández Peguero y Marino Mendoza decidieron sobre medidas cautelares planteadas por el sector de Vargas Maldonado en el PRD.
El primer pedimento en conocerse se trató de un recurso de amparo, que comenzó a las 9:18 am.
En la acción constitucional incoada, el tribunal ordenó de oficio, como medida cautelar, precautoria y provisional, la suspensión de la reunión del CEN, adoptada en la décima resolución de la Comisión Política del PRD, celebrada el primero de este mes, hasta tanto se conozca y decida sobre el fondo del caso.
Aplazó el conocimiento de la audiencia para el viernes próximo, a las 9:00 am, con la finalidad de que los accionantes citen regularmente a los 130 miembros de la Comisión Política que adoptaron las suspensiones y expulsiones.
En el caso de la acción que busca anular las decisiones adoptadas por la Comisión Política, el TSE acogió las medidas cautelares planteadas por los abogados que representan a Vargas Maldonado.
En consecuencia, dispuso suspender como medida cautelar provisional la sexta resolución, a través de la cual se expulsa del PRD a Annie Felipe, Kalil Michel, Angelita Peña, Héctor Papín Domínguez, Saturnino Espinal, Pascual Valenzuela y Víctor Gómez Casanova.
También fue dejada sin efecto la séptima resolución que halló faltas graves y dispuso la suspensión de Rafael Vásquez (Fiquito), en sus funciones de vicepresidente nacional y presidente ex oficio de la región seccionales del exterior y miembro del Consejo Nacional de Disciplina.
Igual medida fue tomada en cuanto a Julio Maríñez y Aníbal García Duvergé, miembro de la comisión de control y secretario nacional de redes sociales.
La octava resolución que atribuye faltas graves a Vargas Maldonado, en virtud de lo cual lo suspende como presidente del PRD y dispone que asuma esas funciones a Andrés Bautista, fue dejada sin efecto.
El TSE adoptó la medida hasta tanto conozca y decida el fondo de la demanda en nulidad, y aplazó el conocimiento del caso para el viernes, con la finalidad de que los demandantes citen regularmente a los demandados no comparecientes.
El inicio
El conocimiento del recurso de amparo se inició con un incidente planteado por los abogados que representaron a Mejía en el proceso, Julio Cury, Eric Raful, Cristóbal Rodríguez y Elías Báez.
Éstos solicitaron la posposición del mismo, porque los emplazamientos no se hicieron de persona a persona a los 130 accionados, por lo que se estaba frente a una nulidad de forma, conforme lo establece el Código de Procedimiento Civil.
Pero los abogados de Vargas Maldonado, Eduardo Jorge Prats, Santiago Rodríguez, José Miguel Vásquez y Miriam Paulino consideraron que lo que se estaba discutiendo eran derechos fundamentales, por lo que debía rechazarse el aplazamiento. En cuanto a la petición de nulidad, sostuvieron que obedece a que las decisiones emitidas por la Comisión Política el primero de este mes son irregulares, porque fueron en contra de las autoridades legítimas del partido.
Los debates y las advertencias
El proceso en que se ventilaban las dos peticiones hechas por el grupo de Vargas Maldonado se desarrolló en medio de un tenso ambiente, la sala del tribunal repleta de personas y muchos cuchicheos y discusiones soterradas. En varias ocasiones, el presidente del TSE, Mariano Rodríguez, tuvo que advertir con sacar a quienes violentaran la solemnidad del tribunal. «El Tribunal Superior Electoral conoce sus atribuciones, aquí no somos unos aparecidos», advirtió el magistrado, en respuesta a una crítica en audiencia hecha por uno de los abogados de Mejía.
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