Iona Lindley, de 16 años, y Laurie Kesteven, de 18, han decidido dar el ’sí quiero’ en la Iglesia Bautista del Sur Parade en Headingley (Leeds).
«Estamos enamorados. No sé cuánto tiempo de vida me queda y creo que jamás tendré otra oportunidad de casarme», dijo la joven de 16 años.
Iona Lindley padece fibrosis quística. Esta enfermedad afecta a los pulmones, el páncreas, hígado e intestino y puede ser mortal por lo que ha pedido a sus padres que le dejaran casarse con su novio, Laurie Kesteven.
El novio es estudiante de Educación Física. «No me da miedo la enfermedad de Iona y tampoco merece la pena cabrearse», afirmó Kesteven a ’Daily Mail’.
La pareja disfrutó de unos días de luna de miel en la isla griega de Rodas. Ahora están planeando la celebración de su primer aniversario y han decidido contar su historia para ayudar concienciar al mundo de una enfermedad como la fibrosis quística.
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